Los millonarios bienes que les incautaron a 'Los Maracuchos': los usaban para torturas
Las propiedades ubicadas en Bogotá y Cundinamarca están avaluadas en 11.000 millones de pesos.
Noticias RCN
11:58 a. m.
Este martes 4 de febrero, la Fiscalía impuso medidas cautelares con fines de extinción de dominio sobre 30 propiedades que estarían vinculadas con 'Los Maracuchos'.
De acuerdo con la investigación, estos bienes no solo fueron adquiridos con dinero ilícito, sino también habrían servido como escenarios para la planeación y ejecución de homicidios, torturas y otros crímenes.
Entre los inmuebles afectados hay tres hoteles, un restaurante con música en vivo, cuatro establecimientos comerciales y cuatro vehículos de alta gama, todos avaluados en cerca de 11.000 millones de pesos.
Los millonarios bienes que les incautaron a 'Los Maracuchos'
Las propiedades embargadas se encuentran en Bogotá y La Mesa, Cundinamarca. Un hotel en la localidad de Kennedy y dos más en el sector de Santa Fe figuran entre los bienes afectados.
Estas zonas han sido señaladas como puntos estratégicos para la operación de 'Los Maracuchos', quienes habrían utilizado estos establecimientos no solo para lavar dinero, sino también como centros de coordinación de sus actividades criminales.
La Fiscalía identificó que en estos espacios se gestaban delitos como la venta de estupefacientes, extorsión y proxenetismo.
Además, se evidenció su vinculación con homicidios selectivos en los que las víctimas eran sometidas a torturas antes de ser asesinadas. Los cuerpos, según las pruebas recolectadas, eran envueltos en bolsas plásticas y abandonados en la vía pública.
'Los Maracuchos' ocultaban dinero sucio en una fachada empresarial
Además de los inmuebles, la Fiscalía embargó cuatro vehículos de gama alta que estarían en poder de la organización. Según los investigadores, estos automóviles habrían sido adquiridos con recursos ilegales y utilizados para la movilización de sus integrantes y la comisión de delitos.
El rastreo de los bienes permitió establecer que la banda criminal no registraban las propiedades a su nombre, sino al de terceros, en un intento por evitar su incautación.
Sin embargo, las pruebas recaudadas demostraron que los inmuebles, negocios y vehículos formaban parte de la estructura patrimonial de la organización.