Los enfrentamientos del expresidente Uribe con la Corte Suprema de Justicia

A Álvaro Uribe Vélez se le puede considerar como el presidente de las mil batallas, un hombre de recio carácter y convicciones profundas que, con el vigor de la política de seguridad democrática, logró recomponer un país sitiado por la barbarie del paramilitarismo y la guerrilla de las Farc. 

Caso alias Tasmania - junio de 2007 

El entonces presidente Uribe dio a conocer una carta firmada por José Orlando Moncada alias ‘Tasmania’, en la que decía que el magistrado auxiliar Iván Velásquez le había ofrecido beneficios a cambio de declarar en contra del mandatario. La corte desestimó la información de ‘Tasmania’.

Para entonces, Uribe expresó reflexiones sobre el papel del alto tribunal, en el programa La Noche de NTN24 con Claudia Gurisatti.

"Cuando la justicia se desvía en la aplicación de la norma y aplica por política, empieza a ser una justicia golpista contra el Estado de derecho", aseguró el 12 de octubre de 2007.

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En junio de 2008 el confeso paramilitar ‘Tasmania’ se retractó, quedando evidenciado que se trataba de un complot para buscar beneficios.

Caso Mario Uribe - agosto de 2007  

Se enfrentó con el magistrado César Julio Valencia cuando éste dijo que lo había llamado para pedirle información sobre el estado de la investigación de su primo, el entonces senador Mario Uribe, investigado por ‘parapolítica’.

Uribe denunció al magistrado por injuria y calumnia. En agosto de 2009 la Comisión de Acusación citó a una audiencia de conciliación, Álvaro Uribe se presentó, pero Valencia Copete nunca llegó.

Caso Tomás Uribe - julio de 2010   

Ante la Comisión de Acusación de la Cámara de Representantes el presidente Uribe denunció al magistrado Yesid Ramírez por prevaricato, luego de que el tribunal pidiera a la Fiscalía investigar a su hijo Tomás Uribe supuestamente por haber tenido injerencia en el nombramiento de Luz Marina Camargo como notaria segunda de la ciudad de Tunja, quien afirmó ser su recomendada. En el juicio Camargo reconoció que se trató de una broma.

"Simplemente atendiendo a infamias y dando lugar a tramitar rencores a través de la justicia", aseguró en julio 29 de 2010 el entones mandatario. Y en 2012 se precluyó el proceso por considerarse el hecho inexistente. 

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"Los enfrentamientos entre el expresidente Álvaro Uribe y la Corte Suprema son un hecho desde su gobierno y fueron muchos que llegaron incluso a denuncias que planteó el presidente de la República contra el presidente de la Corte Suprema de Justicia", dijo Juan Manuel Charry, abogado constitucionalista. 

La opinión pública espera de los magistrados imparcialidad, igualdad en la aplicación de la ley. Fallos con estricto rigor jurídico y no selectivo o político, como la medida adoptada con el prófugo alias Jesús Santrich quien hoy goza de libertad soportada en una decisión que ha sido calificada de ambigua.

“Habría que ver cuántos magistrados de aquella época que fueron auxiliares son hoy en día magistrados titulares y en todo caso tener presente que los magistrados se eligen entre ellos, o sea que eligen la misma línea conceptual o ideológica", añadió Charry. 

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Estas circunstancias ponen en duda la legitimidad de la justicia y no precisamente por el hecho de impartirla porque esa es su naturaleza.  Lo reprochable es que la estructura de la administración de justicia lleve a un estado de crispación ideológica o polarización política en una sociedad ávida de reconciliación.