¿Qué está pasando alrededor de la Universidad Nacional y la elección del rector?
En La Mesa Ancha analizamos el panorama en torno a lo ocurrido en la sede de la Universidad Nacional en Bogotá, y la posesión del nuevo rector.
Noticias RCN
09:10 a. m.
El tema de la Universidad Nacional sigue generando controversia en el país, y más aún después de registrarse manifestaciones en Bogotá, en las que encapuchados se tomaron una estación de Transmilenio y prendieron fuego a los torniquetes.
Otro de los puntos importantes es la elección del nuevo rector, y la posesión de José Ismael Peña en el cargo frente a una notaría.
¿Qué está pasando alrededor de la Universidad Nacional y la elección del rector?
Jorge Iván Cuervo:
“Aquí hay muchas cosas en juego: la autonomía universitaria, la legitimidad democrática de las consultas no vinculantes, la estabilidad misma de la Universidad Nacional porque si este conflicto se extiende vamos a ver disturbios mientras no se resuelva”.
“Yo empezaría por hacer un llamado a las autoridades de la universidad, del Gobierno y el Ministerio de Educación, que rápidamente se sienten y busquen un escenario de solución porque si no se va a alargar y los estudiantes van a perder perfectamente el semestre”.
“Hay cosas en juego. Hubo un profesor, Leopoldo Múnera, que ganó la consulta no vinculante en los tres estamentos, es decir, en los estudiantes, los egresados y entre los profesores. Luego hubo un mecanismo de votación del consejo superior universitario que, según han dicho algunos profesores, por ejemplo, Rodrigo Uprimi, habrían cambiado las reglas del juego que es la elección por mayoría simple”.
“Utilizaron un método que es muy complejo y lo que hace es ir descalificando personas hasta que por fin quedaron dos, y eso no significaría, de acuerdo con los estatutos, una elección por mayoría simple. Por lo tanto, habría una duda sobre la legitimidad jurídica de la elección. Enfrentamos la legitimidad jurídica vs. La legitimidad democrática”.
“Me parece que no estuvo bien la elección de quien fue elegido por eso de irse a posesionar en una notaría, me parece algo furtivo. No es cierto que si no se posesionaba la universidad quedaba acéfala. Los propios estatutos de la Universidad Nacional dicen que si no hay posesión del rector que ha sido elegido, la rectora puede seguir en funciones”.
Juana Afanador:
“La posesión ha sido bastante oscura. Después de que muchas personas han denunciado y contado que estas decisiones del el consejo superior universitario se tomaron antes de la misma elección; hubo reuniones en la casa del delegado de los rectores: Ignacio Mantilla, con presencia de solo uno de los candidatos, cosa que ya viola los estatutos de elección”.
“Se pueden reunir, pero con todos los candidatos, no solo uno y a puerta cerrada. Esto ya causó una serie de dudas muy grandes sobre la elección. Después, la metodología que propuso este mismo grupo no era acordada, lo que hizo que fuera una vez más contra los estatutos”.
“Hay que dejar claro que la Universidad Nacional y el consejo superior universitario no es lo mismo que una junta directiva de una universidad privada. Esta última se puede sentar y elegir a puerta cerrada como quiera y como estén sus estatutos; pero aquí estamos frente a una universidad pública – la más grande del país – donde hay unas reglas que seguir y donde todo parece indicar que este grupo no siguió y se las pasó por encima”.
“La protesta es un derecho, pero pacífico, no es posible que además haya encapuchados, que no lleguen las autoridades, y que estos desmanes terminen agrandándose como no debería”.
Julio Cesar Iglesias
“Me sumo a Juana. No tiene ningún sentido que haya protestas o manifestaciones violentas por un desacuerdo jurídico. La verdad es que no tengo idea en esta discusión jurídica, que al final es eso, quién tiene la razón. Eso lo tiene que definir un juez, el Consejo de Estado en este caso, no yendo a vandalizar Transmilenio. Eso a mí me parece realmente triste”.
“No hay estudiantes en el país que reciban más recursos por parte de la sociedad colombiana, con impuestos de los ciudadanos, que los estudiantes de la Universidad Nacional. Es una palabra quizá odiosa, pero son privilegiados en el contexto colombiano porque su educación es muy cara y la pagamos entre todos – no estoy cuestionando eso – pero lo mínimo que uno esperaría es que esos ciudadanos que ya son mayores de edad – en su mayoría – tengan la responsabilidad suficiente de respetar la ley”.
“No puede ser que ante un desacuerdo jurídico salgan a vandalizar una estación de Transmilenio o agredir ciudadanos en la calle. Lo que se está comentando es que obligaron a un vigilante de la Universidad Nacional a tomar gasolina, lo cual sería un despropósito. Eso no puede ser el comportamiento”.
“Estas personas estigmatizan al 99.9% de los estudiantes de la Universidad Nacional que son honestos y van a aprender y no a destruir”.