El poder de los refranes: la clave para enseñar finanzas a niños y jóvenes
Los refranes pueden ser la mejor lección de economía. Un informe de SINNETIC y BDXL destacó que la enseñanza de dichos populares sobre el ahorro y la administración del dinero influye directamente en la salud financiera de las personas.

Noticias RCN
09:38 p. m.
Un reciente estudio de las firmas SINNETIC y BDXL revelaron un hallazgo sorprendente: crecer sin refranes sobre el dinero podría afectar negativamente la salud financiera de una persona.
La investigación, que analizó los hábitos económicos de los colombianos, concluyó que los dichos populares son una herramienta poderosa para inculcar buenos hábitos de ahorro y administración del dinero desde la infancia.
¿Por qué los refranes influyen en la salud financiera?
El estudio, realizado con una muestra de 1.800 participantes en varias ciudades de Colombia, descubrió que las personas que crecieron en entornos donde se transmitían refranes sobre el dinero tienen una mejor salud financiera, tanto subjetiva, según encuestas, como objetiva, evaluada a través de puntajes en centrales de riesgo.
Algunos datos reveladores indicaron que quienes recuerdan más refranes financieros tienden a tener un mejor manejo del dinero.
En promedio, cada persona recordaba 1,2 refranes relacionados con la economía, y los más comunes estaban asociados con el costo de la vida y el riesgo financiero, mientras que los menos recordados hablaban del ahorro.
¿Cómo pueden los refranes cambiar la manera en que administramos el dinero?
Los expertos explicaron que los dichos populares tienen un impacto profundo porque utilizan un lenguaje accesible y figuras retóricas fáciles de recordar.
Esto hace que sean más efectivos para transmitir conceptos financieros que términos técnicos como "tasa de interés" o "rentabilidad", que muchas personas encuentran difíciles de comprender.
Los ejemplos más claros son:
- A caballo regalado no se le mira el colmillo
- Al que no le cuesta, lo vuelve fiesta
- El que no arriesga, no gana
- El que madruga, Dios le ayuda
- No gastes más de lo que ganas
- Donde hay plata, hay amigos
- Al ojo del amo engorda el ganado
- El que tiene plata, marranea
Estas expresiones, al repetirse en el tiempo, generan redes de significado en el cerebro que moldean decisiones financieras sin necesidad de un análisis racional detallado.
El estudio también resaltó que integrar estos refranes en la educación financiera desde la infancia, tanto en el hogar como en la escuela, podría ser una estrategia efectiva para mejorar la cultura financiera de las futuras generaciones y fomentar una relación más saludable con el dinero.