A un mes de los Juegos Olímpicos París 2024 el río Sena sigue sin estar listo, ¿qué medidas se tomarán?
En el río de la capital francesa se realizarán pruebas de natación en el marco de los Juegos Olímpicos. Al momento, las autoridades ya han invertido 1.400 millones de euros para limpiar el caudal.
AFP
05:18 p. m.
El emblemático río que atraviesa la capital francesa será uno de los grandes protagonistas de los Juegos Olímpicos París 2024, siendo el escenario de la ceremonia de inauguración el 26 de julio y de las pruebas de triatlón y natación en aguas abiertas.
A menos de un mes del esperado evento, análisis publicados por la Alcaldía de París han revelado que la calidad del agua del río Sena continúa siendo un desafío crítico, pues muestra niveles alarmantes de contaminación poniendo en riesgo la viabilidad de las justas.
¿Qué está afectando la calidad del río Sena?
Los resultados de los análisis realizados entre el 16 y el 23 de junio determinaron que el río Sena sigue contaminado para permitir el baño de los deportistas.
El Ayuntamiento de la capital francesa mencionó que “la calidad del agua sigue degradada debido a un contexto hidrológico desfavorable: lluvias, caudal elevado, poca luz solar, temperaturas inferiores a las habituales en esta época y una contaminación río arriba", condiciones que han complicado los esfuerzos para limpiarlo.
Además, la oficina del alcalde de París reveló que los niveles de la bacteria fecal 'escherichia coli' superan significativamente los límites establecidos por las federaciones deportivas internacionales.
Estas condiciones hacen que también corra peligro la ceremonia de inauguración que tenía previsto un desfile a lo largo de seis kilómetros del río.
¿Qué medidas están tomando para no interrumpir los Juegos Olímpicos?
En la última década, se han invertido 1.500 millones de dólares en la mejora del sistema de alcantarillado de París y en la construcción de nuevas instalaciones de tratamiento y almacenamiento de agua.
Sin embargo, las tormentas severas continúan sobrecargando la infraestructura de la capital, resultando en descargas de aguas residuales directamente en el Sena. Por esto, se inició la construcción de la represa Austerlitz que pudiera retener los líquidos que no habían sido tratados.
El Ayuntamiento de París y la prefectura precisaron que las precipitaciones que se registraron el 17 y 18 de junio permitieron que la represa funcionara por primera vez mostrando buenos resultados.
Asimismo, advirtieron que si estas infraestructuras no llegarán a ser suficientes en caso de fuertes lluvias, el plan B de los organizadores sería aplazar unos días las pruebas programadas.