Diez años del papa Francisco: el primer pontífice de origen latinoamericano
Este lunes se cumplen diez años del comienzo del papa Francisco como pontífice de la Iglesia católica.
Noticias RCN
05:54 a. m.
Este lunes, el papa Francisco cumplió sus primeros diez años como líder de la Iglesia católica. Haciendo historia como el primer pontífice de origen latinoamericano y durante su papado ha nombrado 111 cardenales, ha realizado 40 viajes fuera de Italia y ha visitado 59 países. Además, es el papa número 266 y lo han calificado como un reformista, cercano con los pobres y crítico con algunos políticos.
El arribo de Francisco
Antes de convertirse en el máximo jerarca de la Iglesia católica, todos lo conocían por su nombre: Jorge Mario Bergoglio, y también por su asistencia a los menos favorecidos y su misión de evangelizar a la población. Referirse a él es hablar de humildad, de un discurso contundente y por qué no, de su amor por el fútbol.
El técnico químico, el escritor, así como el profesor de literatura y psicología y el licenciado en teología, no es un hombre cualquiera, es Jorge Mario Bergoglio, quien el 13 de marzo de 2013 se convirtió en el primer papa latinoamericano y quien adoptó el nombre de Francisco.
Eligió el camino del sacerdocio iniciando en el seminario diocesano Villa Devoto. Fue maestro de novicios, además de provincial de los jesuitas de su natal Argentina y hasta se desempeñó como rector de colegios, director espiritual y confesor.
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El que fue obispo y arzobispo primado fue nombrado cardenal por el papa Juan Pablo II en 2001 y entre 2005 y 2011, presidente de la Conferencia Episcopal Argentina.
Siempre del lado de los menos favorecidos, abogó por asistencia a los pobres y a los enfermos... Solía transportarse en servicio público y era de los que preparaba su propia comida.
El papa Francisco no ha sido ajeno a las críticas
Así como tiene simpatizantes por su labor, también hay críticos. Su país enfrentó la dictadura militar entre 1976 y 1982 y hay quienes señalan de un silencio cómplice frente a la violencia contra eclesiásticos durante esta oscura época.
Ese es Bergoglio, a quien hoy conocemos más como Francisco y aunque usa su solideo blanco, bajo su sotana palpita un corazón a dos ritmos: el del tango, y el del toque-toque en la cancha, aquel que le hace vibrar cuando ve a su San Lorenzo de Almagro del alma, ese que sigue desde que era tan solo un niño.