La periodista Jineth Bedoya habla de las víctimas de abuso por parte de las Farc
La periodista y activista Jineth Bedoya, una de las figuras más importantes en la lucha contra el abuso y la violencia contra la mujer, habló con Noticias RCN sobre las víctimas de las Farc.
Noticias RCN
09:48 a. m.
¿Qué decirle a todas estas mujeres víctimas de abusos, reclutadas en desde su infancia por las Farc?
No podemos perder la esperanza de que algún día vaya a haber justicia. Lamentablemente, el subregistro que hay en los casos de violencia sexual contra mujeres, al interior de las filas de las Farc y también mujeres civiles, es muy amplio. Creo que es una de las grandes tareas que tiene este país frente a la verdad relacionada con este atroz crimen.
¿Quiénes son los peores victimarios de las mujeres en medio del conflicto?
Yo creo que poner el dolor en una balanza es inequívoco: decir quién ha violado más o cuál violación es peor. Ahí nos equivocamos porque creo que las mujeres que han sido víctimas de paramilitarismo, de agentes del Estado y, por supuesto, de las guerrillas de Las FARC y el ELN son todas iguales. Aquí el problema es de impunidad. Si vemos, el marco de justicia y paz no sirvió para nada. La impunidad de violencia sexual quedó en el 98%. En el caso de Las FARC está en un 100%. Así que aquí el problema es de justicia y de verdad. Ni la JEP ni la Justicia tradicional están a la altura para manejar y castigar este crimen.
Rodrigo Londoño, Timochenko, y el hoy senador Carlos Antonio Lozada dijeron que el abuso a niños y niñas no fue una práctica sistemática en esa guerrilla. Londoño aceptó que hubo relaciones consentidas con menores. ¿Qué decir sobre esto?
Primero, decir que es necesario decir que ellos estudien el Código Penal. Este dice que nunca hay una relación consentida sexual con un menor de edad. Estas se llaman violación. Es un delito que tiene una pena. En el caso de los menores de 14 años se tipifica como acceso carnal violento. En el caso de personas entre los 14 y los 18 años es un delito que tiene que tener un tratamiento especial.
Segundo, creo que hay pruebas suficientes para decir que la violación sexual, el aborto forzado y la esclavitud sexual sí fueron sistemáticas al interior de organizaciones como Las FARC y el paramilitarismo. Los computadores incautados durante las diferentes operaciones militares son un testimonio claro de que la violencia sexual sí existió al interior de la guerrilla de Las FARC.
La corporación Rosa Blanca Denuncia a 25 exjefes de Las FARC por abuso sexual. Desde su perspectiva, ¿cuál justicia debe investigar y juzgar a los responsables de ese delito?
Hay un marco normativo claro para los casos de violencia sexual durante un conflicto armado: ese es un delito que no se puede indultar ni amnistiar. Tiene que recibir, según el marco jurídico de cada país, la máxima pena contemplada. En este caso, según la normativa colombiana, la pena correspondería a 20 años sin posibilidad de pena restaurativa ante un crimen de lesa humanidad. No es negociable.
Es cierto que dentro de los acuerdos se establece que si hay verdad podría negociarse la pena, pero es claro que ninguno de los que han usado las armas durante el conflicto están siendo responsables ni comprometidos con la verdad y el reconocimiento de la culpa.