¿Se permitirán nuevamente las aspersiones aéreas de glifosato en Colombia?
El Gobierno sostiene que se debe utilizar contra los cultivos ilícitos. La OMS lo relacionó con el cáncer.
Noticias RCN
marzo 11 de 2019
09:25 p. m.
09:25 p. m.
El pasado jueves, en la Corte Constitucional se cumplió una audiencia pública en la que los magistrados escucharon distintas posiciones sobre el uso del glifosato para la erradicación de cultivos ilícitos en Colombia.
Las aspersiones aéreas de glifosato fueron prohibidas por el alto tribunal debido a las afectaciones que a juicio de la corte puede tener en la salud humana y en el ambiente.
El debate tuvo lugar en medio de los constantes llamados que ha realizado el gobierno del presidente Donald Trump por el alarmante aumento de los cultivos ilícitos en Colombia.
Según cifras de la ONU, en 2017 crecieron hasta 171.000 hectáreas, frente a las 48.000 que había en 2012.
En la audiencia, el presidente Iván Duque pidió que se module la sentencia T-236 de 2017, mientras que el expresidente Juan Manuel Santos expresó que sería un error retomar la aspersión aérea de glifosato.
NoticiasRCN.com consultó con figuras políticas su posición sobre el tema, si bien algunos se mostraron de acuerdo con que el glifosato nuevamente sea utilizado en aspersiones aéreas para la erradicación de cultivos ilícitos, otros rechazaron tajantemente la idea.
José Jaime Uscátegui, representante por el Centro Democrático, apoyó el planteamiento del presidente Duque.
Para el congresista es una realidad que la aspersión con glifosato ha sido uno de los pocos métodos efectivos para detener el crecimiento desmesurado de los cultivos ilícitos en Colombia y señaló que es posible hacer uso seguro del herbicida cumpliendo con los protocolos de la Corte Constitucional.
También destacó el uso de drones para hacer una aspersión de baja altura de tal manera que se puedan reducir sus efectos nocivos.
“La droga ha sido el combustible de la guerra y la corrupción en Colombia, y no podemos amarrar las manos del Gobierno Nacional para que aplique todas las medidas a su alcance, incluido el uso del glifosato”, indicó Uscátegui.
Por su parte, el representante liberal Julián Peinado dijo que no se debe hacer uso del herbicida, ya que “estudios recientes” demuestran que causa alto riesgo para contraer cáncer. “Estas investigaciones han demostrado un 41% de posibilidades”.
Otra razón, según el liberal, es que ocasiona graves afectaciones al medio ambiente, contamina las fuentes hídricas y acaba con los cultivos de los campesinos.
Mientras que el senador Richard Aguilar habló de adoptar políticas de salud pública para acabar con el narcotráfico y el microtráfico.
“Hay que impulsar políticas integrales de inversión social para que las drogas en un futuro no sean atractivas para nadie. Por ello no veo que la solución sea erradicar con glifosato sino buscar políticas para que llegue el Estado donde ha debido llegar hace décadas”.
Sin embargo, algunos proponen un punto medio en el que también este presente el glifosato. Es así como la senadora Claudia Castellanos manifestó que ante el exponencial crecimiento de los cultivos ilícitos es fundamental una convergencia de acciones por parte de las autoridades.
Fumigación con glifosato, erradicación manual, un programa efectivo de sustitución voluntaria y la lucha frontal contra las organizaciones criminales hacen parte de su propuesta.
“No debemos olvidar que, según el Departamento Nacional de Planeación de Colombia, nuestro país ocupa el cuarto lugar en Latinoamérica en consumo de cocaína y marihuana, se estima que hay cerca de un 1’500.000 consumidores”.
Ante la posible medida de retomar el glifosato, Fredy Mosquera, vocero de la Dignidad Cafetera y Agropecuaria del Tolima, dijo que el uso del herbicida para la erradicación de cultivos de coca en el país no cuenta con el respaldo por parte de las organizaciones como las dignidades agrarias, que agrupan a los campesinos.
“Los estudios realizados sobre las consecuencias en temas de salud para la humanidad, como para la fauna, son motivos suficientes para su rechazo”.
Frente al tema económico, Mosquera aseguró que los costos son millonarios, ya que la erradicación de una hectárea se encuentra entre los 70 y 100 millones de pesos.
A su juicio, retomar el glifosato es una medida inocua para disminuir o erradicar los cultivos ilícitos, puesto que se fumiga en un sector y luego los cultivadores se trasladan a otros sitios porque no se atacan las causas, según explicó.
Por su parte, en 2015 la Organización Mundial de la Salud (OMS) señaló que el glifosato debía clasificarse entre las sustancias que podrían provocar cáncer, lo que en su momento desató una protesta por parte de la empresa Monsanto, productora del herbicida hasta ese momento.
Lo cierto es que actualmente el Gobierno Nacional no ha alcanzado establecer una política efectiva para lograr una verdadera erradicación de los cultivos ilícitos.
Adriana Bernal/NoticiasRCN.com