Cuerpo de abuelo asesinado por el Ejército hace 21 años fue entregado a la familia: lo hicieron pasar como guerrillero
Juan Rafael Giraldo Berrio era un campesino que fue dado por desaparecido y asesinado en Antioquia.

Noticias RCN
06:10 p. m.
La Unidad de Búsqueda informó que la familia Giraldo recibió el cuerpo del abuelo Juan Rafael, reportado como desaparecido y asesinado hace más de dos décadas.
Corría el año 2004 cuando ocurrió este suceso. Juan Rafael Giraldo Berrio era un campesino que vivía con su esposa y siete hijas en la vereda El Empalme, Santa Ana (Antioquia).
¿Quiénes estuvieron detrás del asesinato?
Su rutina se centraba en el cultivo de café, yuca, plátano y caña de azúcar. Aquel 15 de abril de 2004 y en medio del conflicto, uniformados del Batallón de Artillería #4 Coronel Jorge Eduardo Sánchez del Ejército se lo llevaron cuando molía caña en el trapiche, según lo expuesto por la JEP.
Diana Giraldo, una de las hijas, recordó que ese día, los militares le apuntaron a ella y a su madre; para después llevarse a su padre. Cuando esto ocurrió, tenía 14 años.
Estando en la carretera, los hombres armados se toparon con Maribel, nieta de Juan Rafael. “Nos dijeron que se lo llevarían un momentico y luego lo traían”, contó en diálogo con la Unidad de Búsqueda.
El misterio se tornó en tragedia cuando la familia buscó al campesino. Una señora les dijo que lo habían asesinado y el cuerpo lo habían trasladado a Cocorná. Lo que más les sorprendió es que a Juan Rafael lo hicieron pasar como guerrillero, cuando la realidad era distinta.
Confusión de cuerpos
La familia tuvo que desplazarse por el peligro del conflicto y, con ello, la búsqueda quedó inconclusa. Tras cumplir la mayoría de edad, Maribel retormó las labores.
Inicialmente, se creyó que el cuerpo del campesino estaba en la bóveda 122 en el cementerio de Cocorná. Sin embargo, no fue así, debido a que el cadáver que estaba en ese espacio no tenía los rasgos de Juan Rafael.
Aquel cuerpo, caracterizado por tener un ojo de vidrio, correspondía a Luis Eduardo Zuluaga Giraldo, un adulto mayor que vendía chance en el municipio. Lo llamativo para la Unidad es que la bóveda con este nombre estaba en otro sitio.
Con esta información, se supuso que hubo confusión entre los dos cadáveres, por lo que el de Juan Rafael estaba en la bóveda de Luis Eduardo. Tras una intervención, esta hipótesis resultó cierta, la prótesis dental fue la característica que confirmó.
El 17 de marzo, la unidad le entregó el cadáver a la familia en medio de una ceremonia.