Galán entregó balance de marchas en Bogotá y respondió a Petro
Galán destacó que la administración garantizó los derechos de los ciudadanos y que no se presentaron alteraciones graves.

Noticias RCN
06:38 a. m.
Las movilizaciones del 18 de marzo en Bogotá, convocadas tras el hundimiento de la reforma laboral en la Comisión Séptima del Senado, transcurrieron en su mayoría de manera pacífica. El alcalde de la ciudad, Carlos Fernando Galán, calificó la jornada como positiva y aseguró que el Distrito operó con normalidad.
"El Distrito operó con normalidad", explicó Galán
En su balance, Galán destacó que la administración garantizó los derechos de los ciudadanos y que no se presentaron alteraciones graves del orden público. "En Bogotá, miles de personas salieron a manifestarse de manera pacífica. Garantizamos los derechos de los ciudadanos y el Distrito operó con normalidad", afirmó el mandatario.
El alcalde también se refirió a la orden inicial de cerrar la Plaza de Bolívar, emitida por el equipo de seguridad presidencial. "En la mañana nos llegó la alerta de que la seguridad presidencial había dado la orden de cerrar la Plaza de Bolívar y pedimos que la abrieran para garantizar la presencia de los manifestantes", indicó.
Galán subrayó que, pese a las movilizaciones, el Congreso pudo sesionar sin inconvenientes y la jornada escolar en los colegios públicos se desarrolló con normalidad en su mayor parte. "El 81% de las instituciones operó sin afectaciones en la mañana, mientras que en la tarde solo el 7% tuvo ajustes en su horario", agregó.
Respuesta a Petro y operación de la ciudad
Durante su discurso en la Plaza de Bolívar, el presidente Gustavo Petro hizo críticas a la administración distrital. Ante esto, Galán respondió de manera tajante: "En Bogotá nosotros no tenemos tiempo para insultos ni descalificaciones personales".
El resumen de la jornada de marchas en Bogotá
El alcalde también destacó que los servicios de salud y programas sociales del Distrito funcionaron con normalidad, beneficiando a aproximadamente 170.000 personas. Además, más de 300 gestores de convivencia y 1.200 policías acompañaron las marchas, asegurando que los pocos incidentes que surgieron fueran resueltos mediante el diálogo.
Las autoridades locales confirmaron que no se registraron heridos y que los daños materiales fueron menores.