El caso de intolerancia detrás de la cuadriplejia de Erika Morales, la joven que pedía la eutanasia
El salvaje ataque con una botella por parte de dos mujeres llevó a Erika Morales a la cuadriplejia. Su último deseo era la aplicación de la eutanasia.

Noticias RCN
02:17 p. m.
En las últimas horas, Tatiana Morales confirmó el fallecimiento de su hermana, Erika Yanira Morales, la joven de 20 años que pedía la aplicación de la eutanasia por la delicada situación de salud en la que se encontraba desde 2021.
El 2 de agosto del 2021, Erika sufrió un brutal ataque con una botella en una discoteca, según su hermana, a manos de dos mujeres.
Le dieron dos impactos en el cerebelo y a causa de ello le dio un infarto cerebral con secuelas múltiples con un diagnóstico desfavorable.
El presunto caso de intolerancia detrás del caso Erika Morales
Detrás de la grave condición de salud en la que permanecía la joven desde hacía tres años y medio, habría un presunto caso de intolerancia.
Fuentes cercanas a la familia Morales señalaron que Erika habría ido al establecimiento nocturno con un primo. La joven que en ese entonces tenía 16 años habría empujado la puerta del baño, al parecer, sin percatarse que dentro estaba una mujer.
Tras el desafortunado hecho, la presunta agresora habría generado una discusión, donde presuntamente la amenazó.
Cuando Erika salía del lugar, la mujer del encuentro en el baño, supuestamente, acompañada por una amiga, la golpeó en la cabeza con una botella en varias oportunidades:
Mi hermana hace tres años sufrió un accidente donde dos personas a ella me la golpearon con una botella en un establecimiento. Le dieron dos impactos en el cerebelo.
Las mujeres que las habrían atacado, al parecer, ya fueron identificadas. La familia Morales pide justicia por la memoria de Erika Yanira. Tras la muerte de la joven, su hermana envió un contundente mensaje:
Vuela mi ángel, que yo acá haré justicia por ti (…) para que esas asesinas paguen por lo que te hicieron.
¿Cómo terminó Erika Morales cuadripléjica?
De acuerdo con su hermana, Tatiana Morales, quien, en una entrevista para El Contraste, explicó que los golpes recibidos en la cabeza le causaron “un infarto cerebral con secuelas múltiples, con un diagnóstico desfavorable”.
Al parecer, tras el ataque, Erika permaneció consciente, pero con un fuerte dolor de cabeza que se mantuvo. Al día siguiente habría ido a un centro asistencial donde confirmaron la gravedad de los golpes y el daño que le causaría.
Siempre ha estado completamente consciente, se acuerda de todo lo que pasó ese de día.
Erika pedía que le practicaran la eutanasia “porque ya no aguanta los dolores. Se le hizo una opp grado cinco, le dan movimientos involuntarios y hay que aspirarla, entonces ella ya no aguanta”, dijo su hermana a El Contraste.
Me dijo que debía soltarla, que la prueba de amor más grande era dejarla ir. Que solo quería tener una muerte digna y tranquila.