Una coincidencia celestial: los números detrás de la muerte del papa Francisco
Con la muerte del papa Francisco se registró una enorme e inexplicable coincidencia en medio de su amor por San Lorenzo.

Noticias RCN
07:32 p. m.
Este lunes 21 de abril, el mundo se estremeció con la noticia del fallecimiento del papa Francisco, el primer pontífice argentino de la historia y un referente espiritual para millones de personas. A sus 88 años, el sumo pontífice murió a las 2:35 de la madrugada, hora argentina.
Uno de los hechos que más llamó la atención tras conocerse su partida no fue solo su legado religioso o humano, sino una coincidencia numérica que muchos ya califican como una señal del cielo.
Y es que Jorge Mario Bergoglio, nombre de pila del papa, fue durante toda su vida un ferviente hincha de San Lorenzo de Almagro. El club de sus amores lo tuvo siempre como socio, con un número de carné que hoy causa asombro: 88235. Los mismos números de su edad y hora exacta de fallecimiento. ¿Simple azar o una despedida escrita desde lo alto?
San Lorenzo, la pasión terrenal del papa
El vínculo de Francisco con San Lorenzo fue siempre público y sentido. Desde su juventud asistía a los partidos del equipo en el viejo Gasómetro, y aún siendo Papa, recibió camisetas del club en el Vaticano y siguió de cerca la campaña del ‘Ciclón’. El número de socio 88235 lo acompañó incluso en Roma, como un recordatorio de su identidad y sus raíces porteñas.
El club, al enterarse de su partida, publicó un emotivo homenaje en redes sociales y en sus canales oficiales, donde recordó su historia con Bergoglio, incluyendo imágenes en las que vestía orgulloso la camiseta azulgrana. Para los hinchas del ‘Ciclón’, su amor por San Lorenzo fue tan constante como su vocación religiosa.
¿Una despedida con firma divina?
En redes sociales, la coincidencia generó una ola de comentarios. Algunos lo llaman destino. Otros, un guiño desde lo alto. Pero lo cierto es que el hecho de que Francisco haya muerto a los 88 años, a las 2:35, exactamente como el número de su carné de socio 88235, es una de esas coincidencias que parecen demasiado exactas como para ser simples casualidades.
Las dudas quedan abiertas, pero lo que nadie discute es que el papa Francisco se fue en paz, con el alma colmada de fe… y con los colores azulgranas en el corazón.