¿Qué es la productividad y cómo afecta la negociación del salario mínimo?
De cara a las negociaciones del salario mínimo, el Dane reveló tres cifras distintas de productividad. La subcomisión encargada optó por la más alta.
Noticias RCN
05:30 p. m.
El 30 de noviembre se inició la puja por el aumento del salario mínimo. Esta discusión en la que participan empresarios, Gobierno y centrales obreras definirá el aumento del ingreso que recibirán los colombianos en 2023.
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Varias cifras son tenidas en cuenta en la Mesa de Concertación. La primera es el desempleo que, de acuerdo con el Dane, volvió a un dígito después de casi tres años, con 9,7%. La segunda es la inflación, que al cierre de este año se sitúa en 12.2%. La tercera, el IPC, que en opinión del ministro de Hacienda terminará en 2022 en 12,19% y finalmente, la productividad, que para la Corte Constitucional es junto a la inflación el factor más determinante para establecer el alza.
NoticiasRCN.com contactó a los economistas Orlando Santia y Johan Caldas para explicar el concepto y su papel en la negociación que se adelanta sobre el salario mínimo.
¿Qué es la productividad y cómo afecta la negociación del salario mínimo?
De acuerdo con Santia, la productividad es un dato que resulta del proceso de diferentes procedimientos internos medidos desde la capacidad de generación, producción, tiempos y demás. “Son las actividades en las cuales un número determinado de empleados son capaces o realizan un producto de acuerdo con una línea de negocio. Se mide como la eficiencia o ineficiencia que tienen los procesos productivos en un país comparado frente a periodos anteriores”, y se tiene en cuenta por supuesto la generación de ingresos, pues si hay más dinero circulando en Colombia, puede haber inversión, crecimiento económico y salarios más altos.
Esta variable es, según el experto, uno de los grandes debates de cada año y se tiene en cuenta en las negociaciones de los salarios mínimos porque para los empresarios es complicado hacer aumentos si la producción en vez de crecer está disminuyendo. “Esto es una especie de compensación que los gremios le hacen a los trabajadores siempre que se estén optimizando los proceso frente a periodos anteriores”.
Para Johan Caldas, se debe identificar si la productividad nacional sube en la misma proporción que el aumento del mínimo porque de no ser así se afecta la economía. “Eso supondría que estamos siendo menos productivos, pero más costosos salarialmente hablando”, lo cual implica una presión para el sector privado que terminaría por influir, por ejemplo, en la eliminación de empleo.
¿Cómo se usa el dato de la productividad?
Como se mencionó anteriormente, inflación y productividad sientan las bases de las negociaciones. El primer dato arroja un 12,2% y el segundo, que fue elegido por la Mesa de Concertación el 1 de diciembre, pues el Dane presentó tres cifras distintas, fue de 1,24%.
Teniendo claro esto, la suma de ambas variables arroja un valor de 13,44%, que sería el punto básico donde inicia la negociación. De ahí en adelante ocurre lo que caracteriza al mercado: los sectores lanzan sus ofertas y tras una ardua negociación se acuerda una sola. De allí surge el aumento del salario mínimo para 2023, que se estima podría quedar en $1.139.0000, de aplicarse el porcentaje obtenido por inflación + productividad.