Hijos de la mujer drogada y abusada por su esposo reaccionaron a los crímenes de su padre
Durante el segundo día de audiencias, los hijos de la mujer de 72 años víctima de violaciones organizadas por su esposo, enfrentaron desgarradores testimonios sobre los crímenes cometidos.
AFP
02:08 p. m.
Francia se encuentra conmocionada por uno de los casos de abuso sexual más atroces que ha salido a la luz en los últimos años.
En el tribunal de Aviñón, al sur del país, se está desarrollando un juicio contra 51 hombres, acusados de violar repetidamente a una mujer de 72 años, Gisele P., a lo largo de una década.
Lo que hace este caso especialmente perturbador es que el esposo de la víctima, Dominique P., es señalado como el principal organizador de estas agresiones, pues durante casi 50 años, este hombre, con quien ella estaba casada y en proceso de divorcio, fue el cerebro detrás de una red de abusos que implicó a decenas de desconocidos.
Reacciones de los hijos a los crímenes perpetrados por su padre
Este martes 3 de septiembre, la sala del tribunal en Aviñón fue escenario de uno de los momentos más intensos del juicio. Los tres hijos de Gisele P., quienes hasta entonces habían intentado mantener la calma, se estremecieron al escuchar el crudo relato de los abusos organizados por su propio padre.
El juez Roger Arata presentó un resumen detallado de las pruebas encontradas, incluyendo fotografías y videos que mostraban a la víctima inconsciente mientras era agredida sexualmente por múltiples hombres.
Estos materiales fueron descubiertos en 2020, cuando Dominique P. fue arrestado tras ser sorprendido filmando indebidamente a mujeres en un centro comercial. Al ser interrogado sobre los cargos, el acusado respondió con un simple "sí", reconociendo su culpabilidad.
Gisele P., una mujer que ha soportado años de abuso sin ser consciente de la magnitud de lo que ocurría, se mantuvo estoica durante la audiencia. Sin embargo, sus hijos mostraron señales de profundo sufrimiento.
Caroline Darian, una de sus hijas, fue especialmente afectada cuando el juez describió los fotomontajes en los que ella aparecía desnuda, imágenes que su padre guardaba en una carpeta titulada.
La joven, incapaz de soportar la situación, abandonó la sala en dos ocasiones, entre lágrimas y temblores.
El abogado de la familia, Antoine Camus, explicó que el trance del martes fue "duro, pero necesario". Aunque los hijos ya conocían los detalles de los crímenes, escuchar cómo su padre organizaba los abusos y almacenaba imágenes de su propia esposa desnuda fue un golpe emocional devastador.
Caroline tuvo que salir. Era absolutamente insoportable. Incluso si no han descubierto nada nuevo.
¿Cuál fue la reacción del padre al ver que sus hijos conocían la verdad de sus actos?
Dominique P., de 71 años, permaneció impasible durante la presentación de las pruebas. En algunos momentos, conversaba con su abogada, Béatrice Zavarro, o simplemente observaba la sala sin mostrar emoción alguna.
Los otros 17 acusados que están en prisión preventiva, entre ellos hombres con antecedentes de violencia doméstica, violación y otras prácticas aberrantes, también escucharon sin reaccionar mientras se exponían los detalles de sus crímenes.
Frente al caso, los investigadores han documentado un total de 92 violaciones cometidas entre 2011 y 2020, siendo especialmente frecuentes a partir de 2013, cuando la pareja se mudó a Mazan. Durante este período, Dominique P. utilizó un sitio de citas en línea, coco.gg, para contactar y reclutar a los hombres que participarían en las agresiones.
En mensajes descubiertos por la policía, Dominique se jactaba de sus acciones, diciendo a uno de sus contactos: "Tú eres como yo. Te gusta el modo violación".
Además, detallaba cómo administraba somníferos a su esposa para incapacitarla y llevar a cabo los actos que ella normalmente rechazaba.
Del mismo modo, la investigación reveló que Dominique P. llegó a encargar 450 píldoras en un año, a través del sistema nacional de salud francés, Assurance Maladie.
Finalmente, al momento, de los 72 agresores que aparecen en las imágenes y videos incautados, solo 50 han sido identificados, de los cuales 32 comparecen en libertad y uno es juzgado en rebeldía.