Así no se puede presidente
No está bien que el presidente Petro continúe dando a entender que solo se puede llegar a un acuerdo nacional si se hace únicamente lo que él dice.
06:37 a. m.
No está bien que el presidente Gustavo Petro continúe dando a entender que solo se puede llegar a un acuerdo nacional si se hace únicamente lo que él cómo primer mandatario dice.
Con la integración a su gabinete ministerial de personajes como la exministra de Agricultura Cecilia López, de José Antonio Ocampo y de Alejandro Gaviria, quienes no acompañaron a Gustavo Petro en sus causas políticas, el presidente tuvo la oportunidad de iniciar un acercamiento con los sectores que les son opuestos y que han sentido prevención y desconfianza, sin embargo el primer mandatario optó por la vía equivocada de radicalizarse, sacándolos del gabinete y rompiendo con los partidos de la U, Conservador y Liberal que eran las fuerzas políticas que le garantizaban las mayorías en Cámara y Senado.
Tampoco ha hecho lo necesario por ganar la confianza del sector privado y más bien se ha dedicado a profundizar el abismo que los separa, no solo atacándoles verbalmente sino además mostrándoles desprecio cada vez que decide no asistir o llegar tarde a los eventos que le invitan.
Aun así, el presidente insiste en que es necesario un acuerdo nacional y estoy totalmente de acuerdo, el problema es que ese acuerdo nacional no puede hacerse con lo que el primer mandatario quiere o desea.
Para esto es necesario escuchar a los demás, atendiendo y entendiendo sus sugerencias y peticiones, para de esta manera proponer reformas que incluyan las ideas del otro, de lo contrario el tal acuerdo nacional se quedará solo en el deseo de Gustavo Petro.
El presidente tiene la intención de presentar al país reformas que se necesitan, como la de educación, la laboral, la del ICETEX, la de justicia y continuar con las de la salud y pensional y para esto es necesario crear un ambiente político favorable, sin embargo, ha hecho todo lo contrario provocando debates y conflictos innecesarios, creando además un escenario de caos político, al que se ha sumado el innegable problema de orden público porque el primer mandatario parece creer que al tener sentados a los grupos armados ilegales dialogando, estos dejarán sus actividades criminales y ha cesado en la obligación de continuar con la tarea de debilitarlos haciendo uso de las Fuerzas Militares y de Policía.
Bajo este panorama es muy difícil establecer ese acuerdo nacional que el presidente propone porque tiene la idea equivocada de invitar a sus contradictores pidiéndoles cambiar de actitud mientras el como primer mandatario mantiene la costumbre de aislarse sin dar explicaciones; llegar tarde a las citas o lo que es peor, no asistir y dejar a los demás esperando; impartiendo órdenes vía Twitter sin antes socializarlo, y de ñapa, ignorando a los mandatarios locales.
En serio presidente, así no se puede.
@sevillanoscar