¿Mito o realidad? ¿Bañarse con agua fría ayuda a bajar de peso?
Expertos revelan si bañarse con agua fría afecta la pérdida de peso, descubra si esto es verdad o solo se trata de un mito.
Noticias RCN
09:17 p. m.
En la búsqueda constante por métodos efectivos para perder peso, algunas personas se han preguntado si bañarse con agua fría puede ser una solución viable.
La idea de que el agua fría podría ayudar a quemar calorías y, en consecuencia, contribuir a la pérdida de peso ha ganado popularidad en los últimos años.
Pero, ¿qué tan cierto es esto? Vamos a explorar la evidencia científica detrás de esta afirmación.
Efectos del agua fría en el metabolismo
Un estudio publicado en el Journal of Clinical Endocrinology and Metabolism encontró que la exposición al frío puede activar la grasa parda, un tipo de tejido adiposo que genera calor al quemar calorías. Este tipo de grasa es más prevalente en los bebés y disminuye con la edad, pero se ha demostrado que la exposición regular al frío puede aumentar su actividad en adultos.
El papel de la grasa parda
La grasa parda es diferente de la grasa blanca, que almacena energía. La grasa parda quema calorías para generar calor, un proceso conocido como termogénesis.
Según un estudio de 2014 publicado en el Journal of Clinical Investigation, las personas que se exponían regularmente a temperaturas frías mostraban un aumento en la actividad de la grasa parda y un aumento en el gasto energético. Este hallazgo sugiere que las duchas frías podrían, en teoría, aumentar el gasto calórico.
Impacto en la Pérdida de Peso
Un artículo en Harvard Health Publishing estima que la exposición al frío podría aumentar el gasto calórico diario en unas 100 a 200 calorías. Aunque esto podría contribuir a la pérdida de peso a largo plazo, no es una cantidad significativa en comparación con los métodos tradicionales como la dieta y el ejercicio.
Beneficios adicionales del agua fría
Más allá de la pérdida de peso, bañarse con agua fría tiene otros beneficios potenciales. Estudios han demostrado que las duchas frías pueden mejorar la circulación, aumentar la inmunidad y reducir el estrés.
Por ejemplo, un estudio en PLoS One indicó que las duchas frías pueden activar el sistema nervioso simpático, aumentando los niveles de noradrenalina, lo que puede mejorar el estado de ánimo y la alerta .