Más de 700 indígenas Emberá iniciarán su regreso desde Bogotá hacia sus territorios
Tras meses de asentamiento en el Parque Nacional, 280 familias Emberá comenzarán su retorno a las zonas rurales de Risaralda.
Noticias RCN
07:26 a. m.
Este viernes 6 de septiembre marca el inicio formal de del retorno de 702 personas perteneciente a la comunidad indígena Emberá, quienes han estado asentadas en el Parque Nacional de Bogotá desde hace varios meses.
La situación de estas familias, que han estado viviendo en condiciones difíciles en la capital, ha sido un asunto de atención tanto para las autoridades locales como nacionales, que han estado trabajando para facilitar su regreso a las regiones de las cuales fueron desplazadas.
El retorno se desarrollará en tres fases y abarcará un total de 280 familias distribuidas en varios municipios del departamento de Risaralda, principalmente en áreas rurales.
Así será el retorno de los más de 700 indígenas Emberá asentados en el Parque Nacional de Bogotá
A las 8:00 de la mañana de este viernes, las familias Emberá iniciarán una jornada cargada de simbolismo en el Parque Nacional de Bogotá, un espacio que ha sido su hogar temporal, a modo de despedida.
La ceremonia incluirá un ritual dirigido por líderes de la comunidad, seguido de una olla comunitaria, siendo este, el punto de partida de un proceso de retorno esperado.
El acto además hará que las familias realicen el alistamiento de sus pertenencias, continuando el sábado 7 de septiembre, cuando se espera que ya empaquen sus enseres para finalmente partir el domingo 8 de septiembre.
¿Cómo será el retorno de los indígenas Emberá a sus territorios?
- Primera fase: el primer grupo que emprenderá el viaje está compuesto por 58 familias, las cuales serán reubicadas en diversas localidades del municipio de Pueblo Rico, Risaralda.
Dentro de este grupo, 12 familias se dirigirán a la comunidad de Chiifa, mientras que otras 19 familias tienen como destino Dokabú. Tres familias más se quedarán en la localidad de Paparidó y seis familias en Santa Marta, además de otras localidades cercanas.
- Segunda fase: el segundo grupo, compuesto por 146 familias, se trasladará a diversas zonas del municipio de Pueblo Rico, siendo Cascajero el principal destino, donde se establecerán 83 familias.
El resto de este grupo se distribuirá en áreas más pequeñas, como Irakal, Pescadito, Río Colorado, Pasaguedá, Conondo, y Alto Moindó, que son territorios tradicionales del pueblo Emberá.
- Tercera fase del retorno: el tercer y último grupo, conformado por 58 familias, llegará a territorios como Oscordó, Las Torres y Arenales, finalizando así el proceso de retorno que devolverá a la comunidad Emberá a sus raíces tras meses de incertidumbre y condiciones difíciles en Bogotá.
Con la conclusión de esta etapa, las familias podrán reintegrarse a la vida comunitaria en sus resguardos.
Ante esto, Feliciano Sintúa, miembro de la Guardia Indígena Emberá y habitante de la comunidad de Conondo, expresó su gratitud hacia la Unidad para las Víctimas, una entidad que ha sido clave en la logística y el acompañamiento durante el proceso de retorno.
Sintúa manifestó que el regreso a sus tierras representa una oportunidad para reconstruir la vida de su pueblo en un entorno más adecuado para sus costumbres y modo de vida.
En el año 2024, nuestra gente va a llegar a nuestro territorio. Es mejor, porque este territorio tiene tierras también.
La Alcaldía de Bogotá contribuirá económicamente al retorno de los indígenas
La Alcaldía de Bogotá ha jugado un papel fundamental en facilitar el retorno de las familias Emberá. Durante los últimos meses, la administración distrital ha hecho repetidos llamados a las entidades nacionales para acelerar el proceso de traslado y garantizar que las familias regresen en condiciones dignas.
Isabelita Mercado, consejera para las Víctimas, Paz y Reconciliación de Bogotá, aseguró que el Distrito seguirá contribuyendo económicamente para asegurar la sostenibilidad del retorno.
Nos encargaremos de las garantías de sostenibilidad de este retorno, con giros económicos condicionados a la llegada y permanencia en los territorios.
Además, resaltó que, con el retorno de estas 702 personas a sus territorios, se espera que la comunidad pueda recuperar su vida cultural y económica, lejos de las condiciones de desplazamiento en las que se encontraban.
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