Confidencial: error del presidente Gustavo Petro pone a jugar a Francisco Barbosa en el ajedrez

El presidente Gustavo Petro no cerró bien su viaje en España. Aunque fue ovacionado por los parlamentarios de ese país en el hemiciclo y celebrado por la realeza con varios eventos de toda la dignidad, una declaración de menos de un minuto lo hizo poner a tambalearse con la reacción de la opinión pública a la distancia. 

El jefe de Estado, calificativo que le gusta usar al presidente de acuerdo con su propia intervención, dijo que es el jefe del fiscal general porque así lo “ordena la Constitución”. Inmediatamente, el sector justicia y el país político reaccionaron a lo que para muchos es una alerta de un posible giro autoritario del presidente. 

Esto ocurre días después del discurso del 1 de mayo desde el balcón, en el que el presidente aseguró que si las reformas a la salud y a las pensiones no se aprueban, las EPS y los fondos privados se acabarían. También dijo que podría haber una revolución si las reformas no logran puerto, y usó la expresión “iremos hasta donde el pueblo quiera y ni un metro menos de donde el pueblo quiera”. 

El presidente de la Corte Suprema de Justicia, nada más y nada menos, publicó un comunicado expresando que el presidente “desconoce la autonomía e independencia judicial”. Firmas de abogados como la de Víctor Mosquera llevaron las declaraciones del presidente a la Oficina de Derechos Humanos de Naciones Unidas en una carta oficial, advirtiendo del riesgo de las palabras del mandatario.

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La Corporación Excelencia en la Justicia, del abogado Hernando Herrera, también publicó un documento alertando por las afirmaciones. “Solicitamos nueva y expresamente al presidente de la República, Gustavo Petro Urrego, respeto por la justicia, su independencia y a los órganos que la componen”, se lee. 

El propio fiscal Francisco Barbosa llegó a decir que sacaba a su familia del país por amenazas que pudieran presentarse en su contra. Advirtió que iría a Washington de ser necesario a comunicar lo que estaba pasando. Y el fiscal Daniel Hernández, núcleo de toda la polémica, señaló que llevará una denuncia contra Petro a la Comisión de Acusaciones porque el presidente trinó un contenido con una foto del hijo menor del fiscal. 

Lo que viene para la próxima elección de fiscal 

Cómo ya sucedió, es predecible que esta afirmación del presidente repela a la Corte Suprema, y que, para la terna que tiene que proponer el mandatario el próximo año, cuando Barbosa deje el cargo, haya problemas. La Corte es la encargada de elegir y posesionar al fiscal. Pero con estas declaraciones del presidente es probable que no le copien con la primera terna que envíe, en donde seguramente habrá candidatos muy cercanos a Palacio, como es tradicional en el país. Todos los presidentes hacen ternas de candidatos que tengan buenas hojas de vida, pero que sean suficientemente cercanos como para no meter en problemas al Gobierno y mantener un buen desempeño de las investigaciones penales. Aun así, hay casos puntuales en los que los fiscales han resultado más independientes de lo que se imaginaba respecto a Palacio. 

Por ejemplo, Néstor Humberto Martínez estuvo al frente de las investigaciones junto a agencias estadounidenses para el caso de Jesús Santrich, cuando Juan Manuel Santos era todavía presidente y el acuerdo de 2016 empezaba hasta ahora a implementarse. Santrich terminó capturado, fugado y muerto en Venezuela tras escapar y rearmarse. 

Pero al mismo tiempo hay quienes cuestionan su independencia en el caso Odebrecht y el Gobierno Santos. Por ese tema, un fiscal ad hoc tuvo que ser nombrado porque el fiscal había trabajado indirectamente con socios de Odebrecht en el Grupo Aval, lo que no fue comunicado a la Corte en el momento de elección de Martínez.

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¿Barbosa podría ser candidato?

Lo cierto es que el fiscal Barbosa empieza a ser reconocido como uno de los opuestos visibles del presidente Gustavo Petro en la opinión pública por otros mensajes de alerta en la ley de sujeción o sometimiento, y parágrafos de la reforma a la Justicia que le daban prebendas a narcotraficantes y productores de insumos químicos. 

Aunque han tenido reuniones amables en Palacio de las que salen comentarios positivos de los dos, esta ocasión parece haber roto esa relación con mayor trasfondo. Y la ausencia de un líder de la oposición más popular que Vargas Lleras deja al fiscal como el único personaje visible que le está haciendo contra peso al presidente, quien pone la agenda de los medios todos los días con una fuerza incomparable.

El fiscal tampoco lo ha negado. Su respuesta siempre es que está concentrado en terminar su periodo como fiscal, pero no sería sorpresa que sonara en el 2026. El problema sí es, en todo caso, que aunque el propio Petro lo hace visible, el fiscal no tiene fuerza electoral. 

Lo que pase en el caso Nicolás Petro también será definitivo. Por ahora lo único claro es que Barbosa le ganó este round al presidente porque las instituciones y hasta los académicos cercanos a Petro han condenado sus declaraciones y pedido una corrección.