Prontuario de ‘El Tatuado’: cabecilla salvadoreño buscado por extorsiones y estafas que cayó en Antioquia
Mateo Sebastián Pintor usó identificación falsa y empresas ficticias para no levantar sospechas en Colombia.
Noticias RCN
10:45 a. m.
Después de seis meses investigando, la Policía capturó en Rionegro a Mateo Sebastián Pintor Rodríguez, un peligroso cabecilla requerido en El Salvador por extorsión y estafa.
Pintor, más conocido como ‘El Tatuado’, hace parte de la Mara Barrio 18, una de las pandillas más grandes en el país centroamericano que se ha extendido a lo largo del continente. Este hombre cumplía el rol de extorsionista.
Extorsiones y estafas: el modus operandi de ‘El Tatuado’
A mediados de abril en 2018, la Fiscalía salvadoreña lo condenó a 15 años de prisión por extorsionar a la población en Mejicanos, centro de San Salvador. Los hechos se remontan a 2013, hace 12 años.
Autoridades salvadoreñas indicaron que ‘El Tatuado’ llegó a un establecimiento comercial y le dijo al dueño que “tenía que colaborar”. De lo contrario, iba a atentar contra su vida.
La víctima de este caso tuvo que entregarle 25 mil dólares como pago de las extorsiones. Las amenazas siguieron con el paso de los años, tanto así que en marzo de 2017, le exigieron 100 dólares para ese mismo día.
Durante el régimen de excepción en el país centroamericano, ‘El Tatuado’ estafó a los familiares de las personas detenidas. Por medio de llamadas y demás métodos, le prometía a las familias que sus allegados podían quedar en libertad a cambio de máximo 25 mil dólares.
El Juzgado Segundo de Sentencia de San Salvador lo condenó a 15 años de prisión, junto con el pago una multa. Aparte de las extorsiones, buscaban a Pintor por una estafa cometida hace un par de años.
‘El Tatuado’ tenía una identificación falsa
En 2022, defraudó a una persona luego de recibir cinco mil dólares por el pago de un vehículo importado que nunca llegó.
Para evadir a las autoridades, ‘El Tatuado’ se ocultó en Colombia con otra identidad. Sus papeles falsos mostraban que se hacía llamar Matteo Hache Altobelli. A través de empresas ficticias pudo no levantar sospechas.
Tras la captura, se efectuarán los respectivos procedimientos para la extradición.