800 mil civiles han tenido que salir de Rafah por fuerte combates
Tras ocho meses de guerra entre ‘Hamas’ e Israel, estado israelí asegura que han muerto más de 50 “terroristas” en el este de Rafah.
AFP
04:50 p. m.
Los combates entre Israel y Hamás continuaron este sábado en la Franja de Gaza, incluido en Rafah, ciudad del sur donde las hostilidades han provocado la huida de más de 800.000 personas, según la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA).
En el octavo mes de guerra contra el movimiento islamista palestino, las fuerzas israelíes anunciaron este sábado que habían "eliminado a unos cincuenta terroristas" en el este de Rafah, ciudad del extremo sur de Gaza donde sus tropas entraron a principios de mayo.
Según periodistas de la AFP, los disparos de artillería y los bombardeos continúan en el este y noreste de Rafah. Dos personas murieron en un campo de desplazados, indicó el hospital kuwaití de la ciudad.
El director de la UNRWA, Philippe Lazzarini, afirmó que "800.000 personas están en la carretera al haberse visto obligadas a huir desde que las fuerzas israelíes empezaron la operación militar en la zona, el 6 de mayo".
Israel enfrenta la presión internacional para no llevar a cabo su anunciada invasión de Rafah, donde se estima que antes de la operación se hacinaban 1,4 de los 2,4 millones de habitantes del territorio palestino.
Estado hebreo también afronta divisiones políticas internas
El sábado por la noche, el ministro Benny Gantz, miembro del gabinete de guerra israelí, declaró que dimitirá a menos que el primer ministro, Benjamin Netanyahu, apruebe un plan de posguerra para Gaza.
Gantz pidió que se cumplieran seis objetivos, incluido el establecimiento de una administración civil multinacional para el territorio.
Netanyahu respondió tachando las exigencias del ministro de "palabras huecas" que significarían "una derrota para Israel".
Órdenes de evacuación en Jabaliya
En el norte de Gaza, el ejército ordenó por la noche la evacuación "inmediata" de distritos occidentales de la ciudad de Jabaliya, desde donde afirmó que se habían disparado cohetes contra ciudades israelíes.
El brazo armado de la Yihad Islámica Palestina, las Brigadas Al Quds, había indicado previamente que atacó un centro de mando israelí en Jabaliya y disparó una andanada de cohetes hacia Ascalón, ciudad del sur de Israel.
A principios de enero, Israel anunció que había desmantelado la estructura de mando de Hamás en el norte del territorio, pero el viernes el ejército indicó que el movimiento palestino controlaba "totalmente" Jabaliya "hace unos días".
Hamás informó de "decenas" de muertos y "cientos" de heridos en el campo de desplazados de Jabaliya y acusó a Israel de atacar "edificios residenciales" y "escuelas y refugios".
La guerra estalló el 7 de octubre cuando comandos islamistas de Hamás perpetraron un ataque en el sur de Israel, que causó la muerte de más de 1.170 personas, en su mayoría civiles, según un recuento de AFP a partir de cifras oficiales israelíes.
Más de 250 personas fueron capturadas y 124 permanecen secuestradas en Gaza, de las cuales se cree que 37 murieron, según el ejército.
El sábado, Israel anunció que recuperó en Gaza el cuerpo de un israelí muerto el 7 de octubre y lo repatrió.
Hasta ahora 35.386 palestinos, principalmente civiles, han muerto en la vasta ofensiva de represalia lanzada por Israel, según datos del Ministerio de Salud de Gaza, un territorio gobernado por Hamás desde 2007.
"Más de 300 palés" de ayuda
Tras meses de bombardeos y operaciones que arrasaron el norte y centro de la Franja de Gaza, Israel subrayó el jueves su intención de "intensificar" su ofensiva terrestre en Rafah para aniquilar a los últimos batallones de Hamás.
Trece países, incluidos Reino Unido, Alemania, Francia, Canadá y Japón, exhortaron el viernes al país a no lanzar una ofensiva a gran escala en Rafah, calificada de "decisiva" por Netanyahu.
Estados Unidos, gran aliado del Estado hebreo que se opone igualmente a una ofensiva en Rafah, anunció la visita el domingo en Israel del consejero de seguridad nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan.
Además de la ofensiva, los gazatíes se enfrentan a la escasez de suministros debido al asedio de Israel.
El sábado "más de 300 palés" con ayuda humanitaria fueron descargados a través de un muelle flotante temporal instalado por Estados Unidos, declaró el ejército israelí en un comunicado.
Por su parte, el movimiento islamista palestino indicó que "ninguna vía de transporte de ayuda, incluido el muelle flotante, constituye una alternativa a las rutas bajo supervisión palestina".
Este primer cargamento se produce tras varios días de bloqueo a la entrada de ayuda humanitaria en Gaza, donde la ONU alerta de riesgo de hambruna.
Se espera que alrededor de 500 toneladas de ayuda lleguen al territorio palestino en los próximos días.