Comienza el juicio contra la activista que ayudó a una mujer a abortar en Polonia
La acusada se enfrentaría a una pena de hasta tres años de cárcel por facilitar pastillas abortivas a una presunta víctima de violencia de género.
AFP
12:09 p. m.
El juicio contra una activista en favor del aborto comenzó este viernes 8 de abril en Varsovia, convirtiéndose en el primer proceso de este tipo en Polonia y en Europa. Así lo constató un periodista de la AFP. Justyna Wydrzynska, miembro de la organización Aborcyjny Dream Team, es acusada de haber proporcionado, en 2020, píldoras abortivas a una mujer embarazada que afirmaba ser víctima de violencia doméstica.
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El 22 de noviembre del 2021, Wydrzynska fue acusada por los delitos de “proporcionar asistencia al aborto e introducir en el mercado medicamentos sin autorización”, según la legislación polaca, una de las más estrictas de Europa.
Interrupción del embarazo en Polonia: delito para la ley
Los hechos ocurrieron cuando una mujer que quería interrumpir su embarazo, en la duodécima semana, pidió ayuda a Justyna Wydrzynska. Anteriormente, la mujer había querido ir a una clínica de aborto en Alemania, pero su marido se lo impidió. Mientras la implicada esperaba en su casa un paquete con las pastillas, su marido llamó a la policía, que confiscó el medicamento y abrió una investigación.
Polonia, país tradicionalmente católico, ya tenía una de las leyes más restrictivas de Europa en materia de aborto, cuando el Tribunal Constitucional se puso del lado del gobierno populista y nacionalista, en el 2021, declarando permitidas las interrupciones del embarazo únicamente bajo cuatro causales: violación, incesto, peligro para la madre o malformación fetal.
Por su parte, la organización de derechos humanos, Amnistía Internacional, calificó el juicio como “escandaloso”, e hizo un llamado para que se retiren de inmediato los cargos formulados contra la defensora de los derechos humanos. Afirmó que la labor de la activista es importante en un país como Polonia, en el cual el aborto voluntario, por fuera de las causales establecidas, no es legal.
“En un contexto de leyes perjudiciales sobre el aborto, las activistas como Justyna son esenciales para garantizar que las personas embarazadas en Polonia no tienen que correr el riesgo de someterse a un aborto inseguro que ponga en peligro su salud y su vida. Las autoridades polacas deben retirar de inmediato todos los cargos contra ella y despenalizar totalmente esta práctica, incluido ayudar a otras personas a someterse a un aborto”, señaló la entidad.