¿Qué tan viable es la idea de MinTrabajo de congelar los precios de la canasta familiar?

La ministra de Trabajo, Gloria Inés Ramírez, planteó recientemente la posibilidad de que el Gobierno Nacional congelara los precios de los productos de la canasta básica, esto como una medida para enfrentar la inflación más alta en 22 años que tiene actualmente Colombia y ante la reforma tributaria que cuenta con gran optimismo para su aprobación.

Aunque a simple vista dicha estrategia de mantener los precios de los productos que consumen los colombianos a diario puede parecer una solución a la inflación desmedida que amenaza con seguir al alza, debemos examinar con lupa esta propuesta y los efectos que podría desencadenar a futuro.

Lo primero que hay que resaltar es que esta idea surge en medio de lo que serán las negociaciones para el aumento del salario mínimo para el próximo año, pues como han advertido especialistas en el ámbito económico este año podría ser una excepción a la tradicional regla que indica que el aumento del salario mínimo debe superar el índice de inflación anual, esto como una situación totalmente irregular debido las características de la economía global.

Entonces, la propuesta aún no oficial del ministerio de Trabajo, sería aumentar el 10% el salario mínimo (una cifra por debajo de la actual inflación anual, sin contar el tiempo restante del año), y congelar los precios de los productos de la canasta básica para no reducir el poder adquisitivo de los colombianos.

Sin embargo, esta medida que ya ha sido implementada en países con alto índice de inflación como Venezuela o Argentina podría generar un efecto rebote con un impacto directo en la dinámica económica. Para entender más al detalle este fenómeno NoticiasRCN.com habló con Víctor Bonilla, director de posgrados en los programas de Contabilidad y Finanzas de la Universidad de la Salle, sobre los factores para tener en cuenta de esta propuesta.

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¿Congelar los productos de la canasta familiar ayuda a combatir la inflación?

Es una medida que no trae buenas consecuencias para la economía colombiana

El intentar mantener fijo el precio de un bien o producto en el mercado tiene distintos factores que debemos analizar, empezando no se puede garantizar el precio por sí solo porque el producto tiene unos costos intermedios de una cadena de abastecimiento que genera incrementos en su producción y por lo mismo un aumento en el precio final del consumidor.

Además, es muy complicado mantener un precio estable en el tiempo con una economía con altos niveles de inflación así cuente con la intervención del Estado, y a esto debemos sumarle el aumento del salario mínimo que normalmente está indexado a una medida cercana al IPC y esto generaría mayor presión al mercado y posible escasez de producción.

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¿De dónde sale el dinero para mantener congelados los precios?

Sostener los precios se traduce en que el incremento del costo en la producción y transporte de los productos de la canasta familiar lo asuma el Gobierno Nacional, por medio de subsidios a ciertos precios para que no se le transmita el efecto del incremento de los insumos a los consumidores. Por ejemplo, si el Gobierno quiere mantener el precio del litro de leche al precio actual, debe subsidiar los incrementos a los ganaderos, al transporte y cadena de distribución que también se verá afectada por el aumento del precio de la gasolina.

Por otro lado, otro de los puntos de preocupación es la sostenibilidad en el tiempo de esta medida, que tal y como sucedió con el subsidio a los combustibles puede generar un déficit fiscal que a futuro se convierta en mayor recaudación de impuestos.

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