Con una conmovedora misa: así se despidió Argentina del papa Francisco
La Plaza de Mayo se llenó de fieles para despedir al pontífice argentino, mientras una delegación oficial encabezada por el presidente Milei asistió al funeral en el Vaticano.
Noticias RCN
01:26 p. m.
Este sábado 26 de abril, miles de argentinos se congregaron en la emblemática Plaza de Mayo de Buenos Aires para despedir al papa Francisco en una emotiva misa al aire libre.
La emotiva despedida del papa Francisco en Argentina
La celebración tuvo lugar frente a la catedral donde Jorge Bergoglio sirvió como arzobispo antes de ser elegido líder de la Iglesia Católica en 2013.
Mientras en el Vaticano se llevaba a cabo el funeral oficial tras el fallecimiento del pontífice a los 88 años, en la capital argentina se celebraba una eucaristía multitudinaria seguida de una caravana simbólica en honor a su legado.
La plaza se llenó de fieles que, con banderas, bombos y aplausos, recordaron al papa con emoción y gratitud.
Muchos devotos pasaron la noche anterior en la plaza para asegurar un lugar cercano que les permitiera unirse en oración y participar plenamente en el homenaje.
El ambiente reflejaba el profundo impacto que Francisco tuvo en su tierra natal, con jóvenes y adultos por igual, expresando su dolor y gratitud.
El gobierno argentino, por su parte, elogió el trabajo del papa en favor del diálogo interreligioso y la austeridad, valores que, según se destacó, son compartidos con el actual presidente Javier Milei.
El mandatario encabezó la delegación nacional que asistió al funeral en la Ciudad del Vaticano, subrayando la importancia del evento para el país.
La despedida en Buenos Aires no solo fue un acto religioso, sino también un momento de reflexión sobre el legado de Francisco.
Su influencia como líder espiritual y figura pública trascendió las fronteras de Argentina, pero fue en su país de origen donde su partida se sintió con especial intensidad.
El homenaje en la Plaza de Mayo demostró que, a pesar de la distancia física durante su papado, Francisco siguió siendo una figura querida y respetada en Argentina.