Condenan a la mujer que torturó con un arma blanca a una menor en Tuluá
La mujer hirió en repetidas oportunidades a la mejor, le cortó el cabello, las cejas e intentó asfixiarla.
Noticias RCN
03:46 p. m.
Un juez penal del circuito de Tuluá, en Valle del Cauca, condenó a 19 años de prisión a Yajaira Andrea López, tras ser hallada culpable de los delitos de secuestro simple, tortura y hurto agravado.
Condenada mujer que torturó y agredió a menor de edad en Tuluá
La decisión se tomó con base en las pruebas presentadas por la Fiscalía General de la Nación, que demostraron la crueldad de los hechos cometidos contra una adolescente de 17 años.
Según la investigación de la Fiscalía, López contactó a la menor para exigirle la entrega de un arma de fuego que, supuestamente, la víctima poseía.
Sin embargo, al no obtener respuesta, le arrebató las llaves de su motocicleta y, con la ayuda de otras tres personas, la secuestró.
“El ente acusador evidenció que la ahora sentenciada contactó a una menor de 17 años, a quien le exigió que le entregara un arma de fuego, que supuestamente ella tenía”.
“Con este propósito, López se apropió de las llaves de la moto de la víctima y, en compañía de otras tres personas, se llevó a la adolescente para retenerla contra su voluntad para someterla a tratos crueles e inhumanos”.
Mujer hirió en 50 oportunidades a menor de edad en Tuluá
Durante el secuestro, la joven fue sometida a actos de extrema violencia. La agresora la hirió con un arma cortopunzante en 50 oportunidades, le cortó el cabello y las cejas e intentó asfixiarla.
Posteriormente, la víctima fue trasladada a las orillas de un río, donde continuaron los maltratos antes de ser abandonada.
En un acto de supervivencia, la menor fingió estar sin vida para que sus agresores la dejaran en el lugar.
Tiempo después, tras ser abandonada, logró ser auxiliada y trasladada a un centro médico, donde recibió atención especializada para tratar sus heridas.
Según la Fiscalía, Yajaira Andrea López fue capturada en febrero de 2023 en el barrio La Honda, en Buga.
Desde entonces, ha permanecido privada de la libertad y ahora deberá cumplir su condena en un centro penitenciario.