Abel Aguilar: “Néstor Lorenzo es un entrenador que tiene los conceptos claros”

Abel Aguilar podría llegar a integrar el cuerpo técnico del argentino Néstor Lorenzo, quien fue confirmado como el nuevo director técnico de la selección de Colombia. Por ahora se enfoca en el proyecto Semana Gol y Paz, que del 6 al 10 de junio reúne en Barranquilla a líderes sociales de Latinoamérica que trabajan con el fútbol como herramienta de transformación social. Aguilar habló con NoticiasRCN.com sobre la llegada del exasistente de José Néstor Pékerman al banquillo del combinado nacional.

¿Cómo es Néstor Lorenzo en un vestuario?

Es un entrenador que tiene los conceptos claros, ha ido haciendo un proceso muy interesante. Hay que apoyarlo, entender lo que quiere, con tiempo. Estos proyectos, cuando hay cambios, requieren tiempo. Desearle lo mejor. Es una persona que ha tenido su recorrido en muchas competiciones a lo largo de su carrera como jugador y entrenador, y le deseamos que pueda poner todo su conocimiento en práctica. Eso es lo importante. Cuando se toman las decisiones, hay que creer en la gente que ponen al mando y aquí todos vamos a apoyarlo. Creo que ese es el mensaje que debemos tener para que él pueda trabajar con tranquilidad y que encuentre en el entorno del fútbol del país un respaldo importante, porque, definitivamente, si a él le va bien, nos va a ir bien a todos y podremos regresar a mundiales y ser protagonistas nuevamente.

¿Cuál es el estilo de juego que le gusta a él?

He visto su trabajo en el Melgar, pero, para dar una opinión al respecto, tendría que verlo un poco más. Él apenas va a implantar su idea acá. A los argentinos, en general, les gusta ir al frente, ser protagonistas y confían en lo que tienen. Estoy seguro de que, con los jugadores que hay en Colombia, va a querer hacer lo mismo: ser protagonista y tener siempre la iniciativa. Ellos, por mentalidad y carácter, son así. Creo que encontrará un buen grupo de jugadores para poder plasmar esa idea.

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Teniendo en cuenta el reciente partido amistoso contra Arabia Saudita, en el que se nota el cambio generacional que ya es una realidad en la selección colombiana, ¿cómo vio el desempeño de eso jugadores pensando en el futuro y en el objetivo mayor, que es la clasificación al Mundial de 2026?

Hay un buen grupo. Estos partidos sirven muchísimo para ver jugadores, para ver los momentos y analizar comportamientos. Por eso nunca se puede menospreciar rivales ni partidos. No hay partidos amistosos en la selección. Es tiempo que hay que aprovechar muy bien. Se empiezan a perfilar esos jugadores que pueden acercarse al equipo principal, con el objetivo de empezar un ciclo correcto, de retomar el camino y acercarnos a lo que se quiere, que es, como lo decía anteriormente, ser protagonistas nuevamente, pelear los cupos al Mundial y las Copas América.

¿Lorenzo llega como continuismo del proceso que dejó Pékerman en el pasado o llega a labrar su propio camino en la selección?

Todos los entrenadores son distintos. Por más que él haya trabajado con Pékerman muchos años, pienso que él tiene su manera de trabajar, su propia idea. Hay que ver cómo es su planificación y cómo es todo lo que quiere hacer en este proceso, pero yo considero que los entrenadores tienen su manera de trabajar totalmente diferente, por más que cuenten con la influencia de alguien. De pronto le quedaron cosas del profe Pékerman, pero tendrá su sello y eso es lo que seguramente querrá imponer.

¿Cuáles son las bases del proyecto social del que hace parte?

Semana Gol y Paz es una iniciativa de Fundación Selección Colombia, que ya venimos trabajando desde hace algún tiempo. Estamos muy contentos y motivados. La idea es conocer a cientos de líderes sociales de Colombia y América Latina que utilizan el fútbol como herramienta de transformación. Ese es el objetivo. Se han ido haciendo talleres y capacitaciones con ellos durante este año y el anterior, pero en este evento queremos fortalecer esa labor. Habrá muchas sorpresas, mucha gente que se ha unido a esta causa y estamos muy contentos. La idea es poder hacer un seguimiento, que no solamente se quede en esta semana, sino seguir haciendo capacitaciones y talleres a los líderes sociales. Y hacer todo lo que podamos en pro del fútbol para el desarrollo.

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¿Cuál es la intención y la visibilidad que le dará a este proyecto la presencia de Carles Puyol como embajador?

Siempre es importante contar con personas que entiendan este tipo de causas. No solamente por su figura, sino por su trabajo, por todo lo que él ha venido realizando. Es una persona que cree en el fútbol para el desarrollo, en dar otro tipo de mensaje. Más allá del mismo juego, más allá de un resultado, más allá de competir, es tratar de proyectar la vida de muchos niños y niñas. Él lo ha venido haciendo. Lo siento de esa forma. Es importante contar con él y con los otros amigos y compañeros que van a hacer parte. También se han unido algunos artistas. Creo que haremos un gran equipo. Vamos a pasar unos días muy agradables y la idea es que Puyol también conozca un poco de lo que se está haciendo. Que conozca a Colombia también por ese lado: todo lo que hace por medio del fútbol, para dar ese otro tipo de mensaje, más allá de la competencia y del aspecto deportivo.

Una de las banderas de este evento es el fútbol infantil y juvenil. ¿Cómo analiza la actualidad de este rubro en el país y su posible aporte a la selección de Colombia en un futuro?

Es fundamental. Es la base. El fútbol infantil y las categorías menores son la base del fútbol profesional. Son la base de todo lo que puede llegar a ser el fútbol competitivo. Me parece que el trabajo se ha ido haciendo. Tenemos que hacer mucho más énfasis en eso, para que podamos tener, sobre todo a lo largo del tiempo y de una manera duradera, recambio constante, hablando deportivamente, para que las selecciones se nutran de muchos jugadores que sean de nivel internacional y que jueguen en el alto rendimiento. Y está el otro lado: hacer énfasis en estas edades para formar a las personas, niños y niñas, porque es una realidad que no todos y todas van a llegar a jugar fútbol profesional. Es un porcentaje mínimo, realmente. Entonces, la idea es seguir trabajando con los que por alguna u otra razón no pudieron cumplir ese sueño. Que puedan proyectar su vida de una manera distinta: educándolos, enseñándoles y que puedan tener una formación acorde a lo que ellos esperan y lo que piensan.