“Soy un violador y pido perdón”: la confesión del hombre que permitió decenas de abusos a su pareja en Francia
Dominique Pelicot, de 71 años, está siendo juzgado por facilitar que decenas de hombres violaran a su esposa, Gisèle Pelicot, mientras ella estaba inconsciente. El caso involucra a 50 acusados.
AFP
09:17 a. m.
El tribunal de Aviñón, en el sur de Francia, es el escenario de un juicio que ha captado la atención nacional e internacional. Dominique Pelicot, un hombre de 71 años, se enfrenta a cargos graves por drogar a su esposa, Gisèle Pelicot, durante cerca de diez años, permitiendo que al menos 50 hombres la violaran en múltiples ocasiones mientras ella se encontraba bajo los efectos de potentes sedantes.
Así fue como identificaron a los 51 cómplices del hombre que drogaba y permitía abusos a su esposa
El caso no solo ha escandalizado por la brutalidad de los hechos, sino también por la confesión pública de Pelicot, quien admitió ante el tribunal: “Soy un violador”.
La audiencia también cuenta con la presencia de los otros 50 coacusados, quienes, según la versión del principal implicado, estaban plenamente conscientes de que Gisèle había sido drogada antes de ser sometida a los abusos.
Cabe resaltar que, Pelicot había grabado y fotografiado muchas de las violaciones, acumulando pruebas gráficas de los crímenes, por lo que ahora, todos los acusados enfrentan posibles condenas de hasta 20 años de prisión.
Esta fue la cruda confesión del hombre que permitió decenas de abuso a su pareja en Francia
El testimonio de Dominique Pelicot en el tribunal fue tan brutal como escalofriante. “Soy un violador, como todos los que están en esta sala. Lo sabían todos, no pueden decir lo contrario”, declaró sin titubeos, refiriéndose a los 50 hombres que comparten el banquillo de los acusados.
Sus palabras causaron indignación entre algunos de los presentes, quienes han intentado desvincularse de las acusaciones, alegando que desconocían que Gisèle estaba bajo los efectos de drogas durante los encuentros sexuales.
El tribunal escuchó también las declaraciones de la propia víctima, Gisèle Pelicot, quien describió los años de horror que vivió sin siquiera saberlo.
“Ni por un solo segundo dudé de este hombre (…) confiaba plenamente en él. Amé a este hombre durante 50 años. Habría puesto mis manos en el fuego por él”, afirmó entre lágrimas.
Aun así, uno de los aspectos más perturbadores del caso es que Pelicot, lejos de mostrar arrepentimiento inmediato, intentó justificar su comportamiento alegando que las grabaciones le servían como “medida de garantía” para identificar a los participantes.
No obstante, cuando se le interrogó sobre si había sentido placer al registrar las violaciones, admitió que había “una parte de placer”, lo que causó repudio entre los asistentes al juicio.
Cabe recordar que, los abusos comenzaron en 2011 y aunque ella no fue consciente de lo que sucedía hasta años más tarde se destaparon los horrores a los que había sido sometida.
El relato de las víctimas y los otros acusados
Durante las audiencias, Gisèle Pelicot ha enfrentado directamente a su exmarido, escuchando con entereza su testimonio, pero también ha tenido que revivir los momentos más traumáticos de su vida.
“Era maravillosa. La amé 40 años y la amé mal 10 años. Nunca debí hacer eso. Lo arruiné todo. Perdí todo. Debo pagar por ello”, declaró Pelicot, dirigiéndose tanto a su exesposa como al tribunal, pero sus palabras no lograron mitigar el dolor de la víctima, quien, según fuentes cercanas, aún lucha por procesar todo lo que le sucedió durante esos años.
Respecto a los 50 acusados, cuyas edades oscilan entre los 26 y los 74 años, algunos han intentado defenderse alegando que no sabían que Gisèle estaba siendo drogada. Han asegurado que pensaban que se trataba de una pareja libertina, y que los encuentros sexuales eran consensuados.
Sin embargo, la víctima fue contundente en su declaración, negando rotundamente que hubiera dado su consentimiento en algún momento.
Ni siquiera sabía lo que me estaba sucediendo.
Se han realizado manifestaciones en favor de la víctima
El caso Pelicot ha desatado una ola de manifestaciones en Francia, incluso el pasado fin de semana, unas 10.000 personas se reunieron en varias ciudades del país bajo el lema “Todas somos Gisèle”, en apoyo a la víctima.
Las manifestantes, en su mayoría mujeres, exigieron justicia no solo para Gisèle, sino para todas las víctimas de la sumisión química y la violencia sexual en el país.
Historial del hombre que permitió los abusos a su pareja
Las declaraciones de Dominique Pelicot, quien afirmó haber sido él mismo víctima de abusos sexuales en su infancia, no lograron generar simpatía en el tribunal. Relató que a los 9 años fue violado por un enfermero, y que a los 14 participó en una violación grupal de una mujer con discapacidad.
“De mi juventud, solo recuerdo conmociones y traumas”, dijo, pero estas experiencias, lejos de justificar su comportamiento, solo añadieron una capa más de horror a una historia.
Finalmente, en medio de la investigación también se descubrieron imágenes comprometedoras de otras mujeres en la computadora de Pelicot, incluidas fotos de su propia hija y sus dos nueras, tomadas sin su consentimiento mientras estaban desnudas.
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