Corte Suprema avaló uso de ley de 1798 para deportaciones en Estados Unidos
El alto tribunal estableció que los afectados deben tener la posibilidad de impugnar su expulsión, garantizando así un mínimo de debido proceso.
Noticias RCN
09:16 p. m.
La Corte Suprema de Estados Unidos autorizó este lunes al gobierno del presidente Donald Trump a utilizar la Ley de Enemigos Extranjeros de 1798 para deportar a migrantes venezolanos señalados de pertenecer al grupo criminal Tren de Aragua.
Corte Suprema de EE. UU. avaló ley de enemigos extranjeros
Sin embargo, el alto tribunal estableció que los afectados deben tener la posibilidad de impugnar su expulsión, garantizando así un mínimo de debido proceso.
Con una votación de 5 a 4, el fallo permite reanudar las deportaciones que habían sido temporalmente bloqueadas por el juez federal James Boasberg, quien cuestionó la legalidad del uso de esta norma, utilizada históricamente solo en contextos bélicos como la Guerra de 1812 y las dos guerras mundiales.
El fallo fue celebrado por el presidente Trump, quien en su red Truth Social afirmó: "¡Un gran día para la justicia en Estados Unidos! La Corte Suprema ha defendido el estado de derecho al permitir que un presidente, quienquiera que sea, pueda garantizar la seguridad de nuestras fronteras y proteger a nuestras familias".
El fallo revoca las órdenes provisionales emitidas por Boasberg, principalmente por una cuestión de jurisdicción: los migrantes que presentaron demandas legales se encontraban en Texas, mientras que el proceso judicial se desarrollaba en Washington.
La Corte Suprema fue enfática en señalar que las personas afectadas por esta ley deben ser notificadas formalmente y contar con una vía para apelar su deportación.
El máximo tribunal recordó que, aunque el gobierno puede aplicar la Ley de Enemigos Extranjeros, no está exento de respetar derechos fundamentales.
“Deben recibir notificación después de la fecha de esta orden de que están sujetos a deportación bajo la Ley, y deben tener la oportunidad de impugnarla”, señala la decisión judicial.
El uso de la AEA por parte del gobierno de Trump se intensificó tras el envío de tres vuelos con migrantes a El Salvador el pasado 15 de marzo.
Muchos de ellos fueron trasladados a una prisión de máxima seguridad conocida por sus duras condiciones, como parte de una estrategia de disuasión visual que incluyó la difusión de imágenes de los deportados encadenados y con la cabeza rapada.
Organizaciones defensoras de derechos humanos y abogados de los migrantes han cuestionado duramente la política, señalando que varios de los deportados no tienen vínculos con el Tren de Aragua, no cuentan con antecedentes penales y fueron perfilados erróneamente, en algunos casos, solo por tener tatuajes.
El fallo de la Corte Suprema, aunque permite la continuidad de la política migratoria de línea dura impulsada por Trump, también abre la puerta a una oleada de recursos legales que podrían determinar los límites reales del uso de una ley con más de dos siglos de antigüedad.