En entrevista con José Manuel Acevedo, embajador Palmieri habló sobre la 'paz total' del Gobierno Petro

Han sido varios meses importantes para el fortalecimiento de relaciones entre Estados Unidos y Colombia. Desde los intentos por disminuir los trámites para la llegada de colombianos a suelo norteamericano, hasta la visita del presidente Petro a su homólogo Joe Biden para hablar sobre el trabajo mancomunado para revitalizar la Amazonía y la política antidrogas.

El embajador Francisco Palmieri, delegado de Estados Unidos en Colombia, dio su primera entrevista extensa a José Manuel Acevedo, para hablar sobre estas relaciones y recorrer la casa en la que reside en Bogotá.

José Manuel Acevedo: Embajador, cuéntenos un poco la historia de esta casa

Francisco Palmieri: Esta casa tiene una gran historia, es icónica para los colombianos. El entorno es parte del encanto de la casa, que fue construida en los años 50, y uno de sus primeros visitantes fue el presidente Eisenhower.

J. M. A.: Pocos embajadores pueden contar que tienen una mamá colombiana, como usted. ¿Cómo es esa historia?

F. P.: Mi madre salió en los años 50 de Bogotá, tenía una familia cachaca, de apellido Trujillo Martínez. Llegaron a mi pueblo natal en Connecticut, y siempre tuvimos mucho contacto con la familia en Colombia. 

En septiembre tuvimos una ‘trujillada’ de 46 primos acá, con muchos que no conocía y un tío que vino de visita desde Villavicencio.

J. M. A.: ¿Cuál es su plato preferido?

F. P.: Es una cosa de mi niñez que mi madre siempre hacía: la arepa paisa. Para mí, la arepa paisa con mantequilla y sal es fenomenal.

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El solar es la parte favorita del embajador, pues asegura que captura la luz de la ciudad en todos los momentos del día. Por lo que eligió este espacio para conversar con Noticias RCN, el mismo lugar en el que ha recibido a ministros y altos funcionarios en ocasiones anteriores.

J. M. A.: ¿Cómo ve la relación entre el Gobierno de Gustavo Petro y el de Estados Unidos?

 F. P.: Fue muy importante para la democracia colombiana tener esa oportunidad de cambiar el poder del partido de Duque a la presidencia de Gustavo Petro. Hemos trabajado con el nuevo Gobierno, como lo hemos hecho con cualquier otro desde hace mucho tiempo.

Por eso es importante, en este momento histórico, escuchar y demostrar que los intereses entre los dos países siguen adelante.

J. M. A.: ¿Cómo ve Estados Unidos la propuesta de sometimiento del presidente Petro y las intenciones de negociar con narcotraficantes?

F. P.: Creo que todos los colombianos merecen la paz y quieren la paz. El acuerdo de 2016 fue algo muy importante para el país. Entiendo que, en este momento, el presidente Petro quiere impulsar una ‘paz total’ para dar más tranquilidad en las zonas rurales donde las personas han sufrido tanto.

El gobierno es muy bueno al hablar de justicia para negociar con los grupos armados criminales, por supuesto es algo delicado, porque hay que asegurar que no hay impunidad y que las víctimas sientan que no se va a olvidar lo que han sufrido.

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J. M. A.: Es decir, no una negociación política, pero sí con la justicia, como ocurre en los Estados Unidos

F. P.: Sí, ese asunto de política y criminal es algo que tiene que definir muy bien Colombia, desde el Ejecutivo y el Congreso, para entender donde se dibujan esas líneas entre grupos criminales y aquellos que siempre han tenido un fundamento político.

J. M. A.: ¿Cuál es su posición frente a la visita del presidente Petro a Joe Biden?

F. P.: Yo no sé por qué hay una división. Esto refleja 200 años de buenas relaciones. El presidente Biden recibió al presidente Petro en la sala Oval, tuvieron pláticas muy productivas y positivas. Hablaron de cambio climático, ‘paz total’ y fue muy productiva.

Fue excelente esta oportunidad para que los dos líderes se sentaran en la mesa a discutir dos temas importantes.

J. M. A.: ¿Cómo va el tema de las visas para los colombianos en Estados Unidos?

F. P.: Hay un proceso para quitar la necesidad de la visa, dura un tiempo y tiene requisitos. Pero poco a poco el consulado ha disminuido las filas. Todavía hay una espera larga para los que no tienen la visa, pero estamos trabajando en eso.

J. M. A.: Tras el levantamiento del título 42, ¿cuál es el mensaje que envía a los migrantes que pasan por Colombia para llegar a EE. UU.?

F. P.: El camino es peligroso, mucha gente muere, sufren. Por eso los dos gobiernos buscamos caminos legales para que la gente no tenga que dejar sus comunidades y puedan llegar a centros para aprender de las posibilidades y que sea más seguro si quieren ir a Estados Unidos.

J. M. A.: ¿Cómo vio los avances tras la asamblea sobre Venezuela que se llevó a cabo en Bogotá?

F. P.: Veo que Colombia impulsó un mejor entendimiento del desafío. Hubo 20 países alrededor de la mesa con el presidente Petro y el canciller Leyva. Todos vieron la situación desde la misma perspectiva.

Necesitan volver a México para continuar las negociaciones entre las fuerzas democráticas y el régimen de Maduro.

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Para el embajador Palmieri, el trabajo está en lograr proteger a los líderes sociales y activistas en el país, quienes han sufrido amenazas y ataques constantes desde la firma del acuerdo de paz del 2016 en el país.

Aseguró que cualquier Gobierno debe acumular la experiencia para aprender a manejar la Fuerza Pública, y que el presidente Petro está aprendiendo a hacer esto para cultivar la paz y salvar vidas.