Industria siderúrgica, comprometida con el progreso y desarrollo de Colombia
El sector ha continuado respaldando la recuperación económica del país, acompañando los programas de reactivación del sector construcción.
01:15 p. m.
El 2022 fue un año desafiante. Las economías mundiales avanzaban en su recuperación luego de los efectos de la pandemia. En febrero, para sorpresa global, Rusia invadía a Ucrania, alterando los precios de la energía, cadenas de suministro de materias primas para la fabricación de acero, además de traer consigo efectos colaterales, como las sanciones comerciales impuestas por el G7 a los invasores y el consecuente desvío comercial de los rusos, intentado evadir las medidas impuestas en su contra, causando distorsiones en el mercado internacional del acero.
Mientras tanto, el mundo empezaba una carrera por controlar la inflación con una serie de políticas anticíclicas, aumentando las tasas de interés para reducir el consumo de bienes y servicios, impactando la demanda de vivienda. Por su parte, China enfrentaba rebrotes del virus y mantenía cuarentenas en algunas zonas por su política de Cero COVID, siendo Tangshan, región especializada en la fabricación de acero, una de las provincias más afectadas.
Como consecuencia de este panorama mundial, y como lo ha reafirmado el Steel Committee de la OCDE, el 2022 de la industria siderúrgica internacional estuvo principalmente marcado por una contracción importante del consumo de acero, un aumento global en los costos de energía, así como un crecimiento sostenido y rápido en la capacidad de producción, manteniendo la brecha de la industria entre la cantidad de acero que es capaz de producir y la que se fabrica.
En medio de este contexto internacional tan volátil, el sector siderúrgico colombiano demostró las ventajas de contar con una industria fuerte y capaz de abastecer la demanda local sin depender de las fluctuaciones internacionales. El sector ha continuado respaldando la recuperación económica del país, acompañando los programas de reactivación del sector construcción y supliendo el déficit de acero en la oferta internacional.
La industria siderúrgica nacional ha logrado consolidarse como un sector ambientalmente responsable, con 58% de menos emisiones de CO2 que el promedio mundial por cada tonelada de acero producida, siendo ejemplo internacional de sostenibilidad gracias a su modelo de producción a través del reciclaje, que significa también formalización, inclusión y oportunidades para las más de 60 mil familias de recicladores en el país.
El 2023 también traerá consigo sus propios desafíos. Como se ratificó en la sesión número 92 del Steel Committee de la OCDE, este año la industria siderúrgica internacional debe enfrentarse a retos generales, como la inflación, el aumento de las tasas de interés y de los costos energéticos, mientras que un reto propio del sector será mantener su compromiso con la descarbonización.
Por lo pronto, el país debe saber que la industria siderúrgica sigue comprometida con el progreso y el desarrollo de Colombia, manteniéndonos fuertes y competitivos, preservando el medio ambiente, fortaleciendo la economía circular, apoyando el reciclaje, continuando con la reducción de emisiones de CO2, respaldando la economía inclusiva, la formalización laboral, la generación de empleo de calidad, y velando por garantizar un mercado en equilibrio y de libre competencia. El 2023 será el año del acero.
Por: @MariaJulianaOS, directora ejecutiva del Comité Colombiano de Productores de Acero de la ANDI.