Clínica de Occidente en Bogotá cierra maternidad y neonatología: esta sería la razón
La baja natalidad y las deudas millonarias de las EPS obligan a cerrar más servicios médicos.
Noticias RCN
03:09 p. m.
La Clínica de Occidente, una de las instituciones médicas más importantes de Bogotá, confirmó el cierre definitivo de sus servicios de obstetricia y neonatología, lo que significa que madres gestantes y recién nacidos perderán una de las pocas opciones de atención especializada en la ciudad.
La institución informó que el servicio de obstetricia estará disponible hasta el 21 de abril, mientras que la unidad de neonatología operará solo hasta el 30 del mismo mes.
La decisión, según la clínica, se debe a la caída en la tasa de natalidad en Colombia y a la crisis financiera del sector salud, que ha empeorado por las deudas impagables de las EPS.
Este nuevo cierre se suma a la alarmante cifra de más de 9.000 servicios médicos clausurados de manera definitiva en los últimos dos años, mientras que otros 26.000 han sido suspendidos temporalmente en hospitales y clínicas de todo el país.
¿Por qué la clínica tomó esta decisión?
A través de un comunicado, la Clínica de Occidente explicó que el principal motivo del cierre es la drástica disminución de los nacimientos en el país.
Según datos del DANE, en lo que va del 2024 la tasa de natalidad ha registrado una caída del 13,7%, lo que ha reducido significativamente la atención de partos y, por lo tanto, ha afectado la viabilidad de estos servicios.
La significativa disminución de la tasa de natalidad en el país y la consecuente reducción en la atención de partos ha obligado a la institución a tomar la difícil decisión de cerrar sus servicios de obstetricia y neonatología.
Sin embargo, la crisis va mucho más allá de la baja natalidad, pues la grave situación financiera del sistema de salud también ha sido un factor determinante.
EPS en mora: ¿quién pagará la cuenta?
Juan Carlos Giraldo, director ejecutivo de la Asociación de Clínicas y Hospitales, advirtió que las deudas de las EPS han aumentado de 18,9 billones a 20,3 billones de pesos, haciendo que muchas instituciones no puedan seguir operando con normalidad.
Indudablemente, ellos aducen varios motivos. Uno tiene que ver con las dificultades, con la crisis financiera del sistema y el crecimiento de unas deudas que se van tornando en deudas muy difíciles de recuperar.
En particular, el caso de Nueva EPS es preocupante, ya que no solo ha incrementado su deuda, sino que también ha empeorado su capacidad de pago.
La Nueva EPS no solo crece en monto de deuda, sino que se agrava su morosidad. Ese es un punto de alerta, un bombillo rojo que está encendido.
Piden intervención urgente del Gobierno
Ante este panorama, Giraldo hizo un llamado de emergencia al Gobierno Nacional para que actúe de inmediato y evite que la crisis se siga profundizando.
Con Nueva EPS le estamos diciendo al Gobierno Nacional: esta es una cifra muy grande y este deterioro en la morosidad es preocupante. Esta entidad necesita de manera urgente recursos adicionales y, posiblemente, una capitalización.
La falta de medidas concretas podría empeorar la crisis hospitalaria en el país, dejando sin atención médica a miles de pacientes, especialmente mujeres en estado de embarazo y recién nacidos que dependen de estos servicios.
¿Qué otros hospitales y clínicas al borde del colapso?
En los últimos años, numerosos hospitales y clínicas han tenido que reducir o cerrar servicios esenciales debido a la crisis financiera y el incumplimiento en los pagos por parte de las EPS.
Algunas de las instituciones afectadas recientemente incluyen:
- Hospital San Ignacio (Bogotá): redujo la prestación de varios servicios.
- Instituto Franklin Delano Roosevelt: cerró un piso completo debido a problemas económicos.
- Clínica Universitaria de la Pontificia Bolivariana: Suspendió la atención a usuarios de la Nueva EPS.