¿Qué pasará con los animales que convivían con la comunidad Emberá tras su retorno?
Tras la partida de la comunidad Emberá del Parque Nacional, 57 animales enfrentan un futuro incierto, mientras las autoridades buscan garantizar su bienestar en el regreso a sus tierras.
Noticias RCN
07:29 p. m.
Durante varios meses, el Parque Nacional en Bogotá se convirtió en el hogar temporal de la comunidad Emberá, un pueblo indígena que, por diversas razones, fue desplazado de su territorio ancestral.
Junto a ellos, vivieron sus animales: perros, gallinas, patos y un conejo que se convirtieron en parte integral de la vida cotidiana de la comunidad en este espacio urbano.
Ahora que las autoridades han iniciado el retorno de las 670 personas Emberá a sus tierras, surge una pregunta inquietante: ¿qué pasará con estos animales que compartieron ese tiempo con sus dueños en condiciones tan adversas?
¿Qué pasará con los animales que convivían con la comunidad Emberá tras su retorno?
Un operativo interinstitucional encabezado por el Gobierno Nacional, la Alcaldía Mayor de Bogotá, la Alcaldía Local de Santa Fe y diversas entidades del Distrito marcó el comienzo de una nueva etapa para la comunidad Emberá.
Este proceso de retorno, que ha sido esperado durante meses, no solo ha implicado el traslado de personas, sino que también ha puesto sobre la mesa un reto aún más delicado: el bienestar y el futuro de los 57 animales que convivieron con ellos en el asentamiento del Parque Nacional.
Desde perros, gallinas, patos hasta un conejo, estos animales no fueron meros compañeros ocasionales, pues para la comunidad Emberá, estos seres se convirtieron en familia, un apoyo emocional en un momento de incertidumbre.
"Son como nuestros hijos", comentó una madre Emberá mientras acariciaba a su perro, uno de los 33 caninos identificados por el Instituto Distrital de Protección y Bienestar Animal (IDPYBA).
Ellos también sufrieron con nosotros, y no podríamos dejarlos atrás.
El IDPYBA, en un esfuerzo coordinado con la Alcaldía Local de Santa Fe, se ha encargado de realizar la identificación y caracterización de cada uno de estos animales.
Según Laura Vivian Idrobo Arévalo, subdirectora de Atención a la Fauna, todos los perros han sido esterilizados y cuentan con chips de identificación, medidas que se tomaron durante las brigadas de bienestar animal que se adelantaron en meses anteriores.
No solo nos preocupa que los animales estén en buen estado físico, sino que comprendemos el vínculo emocional que tienen con sus dueños. Estamos comprometidos a garantizar que el traslado sea lo menos traumático posible para ellos.
¿A dónde serán llevados los animales que convivieron con la comunidad Emberá?
Durante la jornada de verificación, los miembros de la comunidad Emberá expresaron unánimemente su deseo de llevar consigo a sus animales de vuelta a su territorio. Sin embargo, este traslado no es sencillo.
El proceso requiere una cuidadosa planificación para asegurar que los animales no sufran en el trayecto. Ante esto, se les proporcionaron capacitaciones sobre la importancia de la hidratación y ventilación adecuadas durante el desplazamiento, así como otras consideraciones para garantizar que los animales lleguen en las mejores condiciones a su nuevo destino.
"Es un viaje largo y queremos asegurarnos de que los animales, que han sido fieles compañeros durante este tiempo de incertidumbre, no padezcan ningún tipo de malestar o sufrimiento", expresó Mariana Martin Leyes Barvo, directora general del IDPYBA.
El traslado de estos animales no es solo una cuestión logística, sino también emocional. Estamos hablando de seres que han compartido el dolor y la alegría de sus cuidadores, que han vivido las mismas penurias y ahora merecen un final digno junto a ellos.
La comunidad Emberá, a pesar de las difíciles condiciones en las que vivieron durante meses en el Parque Nacional, siempre se preocupó por el bienestar de sus animales, ya que para ellos, no eran simplemente mascotas, sino guardianes y compañeros que ofrecían consuelo en momentos de angustia.
"Nuestro perro no solo nos protegía, también nos daba compañía en las noches más frías, cuando parecía que no teníamos nada", relató un hombre Emberá, mientras preparaba a su perro para el traslado. "Ahora, volveremos juntos a casa".