En las entrañas del Cauca: la población civil víctima del fuego cruzado
Vea el especial de Noticias RCN sobre la violencia que se vive en el departamento del Cauca, y cómo la población civil es víctima del fuego cruzado.
Noticias RCN
10:04 p. m.
La periodista Stephanie Bates llegó a la vereda El Damián, en Toribio, Cauca, donde se vive la crudeza de los ataques de los grupos armados ilegales. En un recorrido por la zona habló con los campesinos que padecen el fuego cruzado.
Para llegar, debe cruzar por unas trochas en donde constantemente se registran enfrentamientos entre los grupos armados y la fuerza pública.
Episodio 1 | Zona de fuego: en las entrañas del Cauca
Al llegar, conocimos el testimonio de uno de los habitantes sobre uno de los tantos hechos violentos de los que son víctimas, sin embargo, en medio de la entrevista un estruendo interrumpió el silencio: una bomba estalló cerca. Se trataría de un llamado tatuco que habría lanzado la guerrilla.
“Un día cayeron tres bombas”, relató a Noticias RCN una de las menores que viven en El Damián. Pidió a los violentos “que se vayan de aquí”.
Un campesino de la región también se refirió a los constantes enfrentamientos en los que la población resulta en medio del fuego cruzado.
“La comunidad en general de la vereda, principalmente en El Damián, tuvimos unos momentos muy aterradores donde la gente no sabe qué hacer; uno en realidad trata de controlarse, pero de todas maneras estar expuesto a los disparos y al cruce de balas es muy complicado”, manifestó.
Uno de los sitios donde se resguarda la población en medio de estos violentos enfrentamientos no pudo librarse de las balas. En la fachada del salón se ven varios impactos de bala, incluso, en uno de los marcos se ve el proyectil incrustado.
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Episodio 2 | Zona de fuego: en las entrañas del Cauca
Los relatos de quienes viven en medio de combates en El Damián, de la vereda Toribio en Cauca, son escalofriantes. Stephanie Bates estuvo con la comunidad de esta zona, donde las viviendas son alcanzadas por impactos de bala.
Campesinos cuentan cómo desde las montañas los grupos armados lanzan tatucos en contra de la fuerza pública, muy cerca de El Damián y de los niños, que aseguran sentirse mal y muy atemorizados por la violencia que los acecha.
“Que se vayan los guerrilleros que cogieron la montaña”, piden los niños.
En la noche, antes de ser víctimas del fuego cruzado, los habitantes de El Damián apagaban todas las luces de sus casas, como es usual, sin embargo, la violencia les exige ahora que las mantengan encendidas para avisar a los grupos armados que hay habitantes en esas viviendas, que les respeten su vida.
No obstante, los proyectiles continúan alcanzando las paredes de las habitaciones, cocinas, baños y otras partes de las casas. La zozobra persiste. Temen que mientras duermen sean alcanzados por las balas.
“No podemos dormir tranquilos porque eso ya se ha visto que las casas son afectadas”.
Las guerrillas usan a la población civil como escudo humano, al esconderse detrás de las viviendas para evitar las balas.
Episodio 3 | Zona de fuego: en las entrañas del Cauca
Una de las tácticas que usan los grupos armados ilegales en el Cauca para delinquir sin ser detectados por las autoridades es justamente camuflarse entre los campesinos. Esto fue confirmado por la periodista Stephanie Bates.
En el centro educativo El Damián se ven varias banderas que prohíben las armas en ese sitio, al considerarse un lugar protegido.
“El lugar está protegido porque no es la primera vez que se da una situación de conflicto en la que quedamos en medio de las balas de grupos armados. Tenemos sitios donde nos ubicamos estratégicamente de acuerdo con la situación; cuando son disparos uno sabe que la pared le sirve, pero cuando son tatucos o bombas, no tenemos un sitio”, manifestó una docente de la institución.
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El fuego cruzado de los grupos armados ilegales en esta región obliga a los profesores a enseñarle a los niños a refugiarse bajo los pupitres; ellos, en medio de las clases rezan por sus vidas.
“Lo que buscamos es que el niño sea niño, mantener la calma. No se puede naturalizar algo que no es normal”.
Por otra parte, campesinos manifiestan que en medio de los enfrentamientos deben arriesgarse “porque no hay otra alternativa”.
Stephanie Bates, en medio de la realización del especial periodístico, halló un objeto poco natural de los cafetales en esta zona del Cauca: una granada de fragmentación.
También revelan que los “milicianos son enviados disfrazados como campesinos”. Señalan que van “con un lazo, haciendo de cuenta que se les perdió un caballo, y hasta pasan a veces por medio del Ejército”.
La montaña más grande que tienen ellos es la población civil
En medio de los caminos encontramos un tatuco, también una llamada ‘bomba loca’, según los habitantes de El Damián, denominada así “porque no tiene dirección”. Al igual que se hallan por los senderos y pastizales fragmentos de pipetas usadas como explosivos para atentar contra la fuerza pública.
El conflicto armado en la región afecta los proyectos productivos que no tienen ninguna relación con el narcotráfico.
“Las vacas se estresan con solo el ruido de la ametralladora o las explosiones. Se afectan. Y a nosotros también porque madrugamos a ordeñar las vacas, pero ahorita no lo estamos haciendo por temor, porque a veces uno se encuentra artefactos explosivos”.
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