Hinchas de Países Bajos e Inglaterra provocaron disturbios antes de la semifinal de la Eurocopa: video
Antes del esperado encuentro entre Países Bajos e Inglaterra, las calles de Dortmund se convirtieron en escenario de violencia cuando hinchas de ambos equipos protagonizaron una batalla campal horas antes de la semifinal.
Noticias RCN
03:51 p. m.
Horas antes del crucial encuentro entre Países Bajos e Inglaterra en el Signal Iduna Park de Dortmund, la ciudad alemana fue testigo de escenas de violencia que empañaron el ambiente deportivo. Lo que comenzó como un día de expectativa y entusiasmo se convirtió en un enfrentamiento caótico entre hinchas de ambos equipos, dejando un triste saldo de destrucción y confrontación.
Pelea entre hinchas de Países Bajos e Inglaterra
En un bar de la ciudad, aficionados ingleses disfrutaban tranquilamente cuando una multitud de seguidores neerlandeses, conocidos por su fervor como la 'marea naranja', rodearon el lugar. Lo que comenzó con provocaciones verbales pronto escaló a una pelea física, con sillas siendo lanzadas y botellas de cerveza utilizadas como proyectiles, convirtiendo el bar en un campo de batalla momentáneo.
La situación se tornó aún más grave cuando los hinchas neerlandeses lograron ingresar al bar, intensificando los enfrentamientos y causando daños significativos en la propiedad. Cristales rotos, mobiliario destrozado y pérdidas materiales fueron el triste resultado de este lamentable incidente, capturado en videos que rápidamente se propagaron en las redes sociales, alimentando la indignación y la preocupación.
Batalla campal horas antes de la semifinal de la Eurocopa
Las autoridades locales respondieron rápidamente, desplegando un refuerzo significativo de seguridad en los alrededores del estadio del Borussia Dortmund para prevenir más disturbios antes del partido. Sin embargo, la violencia ya había dejado su marca negativa en lo que debería haber sido un día de celebración deportiva y camaradería.
Este incidente subraya los desafíos y riesgos asociados con la gestión de grandes eventos deportivos, donde la pasión y la rivalidad pueden desencadenar episodios de violencia que ponen en peligro la seguridad de los aficionados y manchan la reputación del deporte. Es un recordatorio de la necesidad de medidas preventivas y un ambiente de respeto mutuo entre los seguidores, para preservar la integridad y el espíritu competitivo del fútbol.