Uruguay se aferra a su historia y sueña con la clasificación

La ‘celeste’ que no ha tenido un buen desempeño en los dos primeros partidos, empate ante Corea del Sur y derrota contra Portugal, buscará una victoria ante las ‘blacks stars’ para asegurar su paso a los octavos de final del torneo.

La escuadra ‘charrúa’ se aferra a la ilusión haciendo eco de su historia como bicampeona del mundo para lograr lo que muchos consideran como una hazaña.

Y es que Uruguay es de los equipos que ha sabido sobreponerse a las adversidades a lo largo de los años. Por ejemplo, en 1930, en la primera cita mundialista en la que el país sudamericano fue el anfitrión del torneo, ‘la celeste´ disputó la final en el estadio Centenario ante Argentina.

Pablo Dorado puso al frente a los locales, pero al final del primer tiempo Argentina iba al frente del marcador con goles de Carlos Peucelle y Guillermo Stábile. Pero en el segundo tiempo, Uruguay comenzó a mostrar su empuje que con los años se ganó el nombre de ´garra charrúa’ y con goles de José Pedro Cea, Victoriano Santos y Héctor ‘el manco divino’ Castro remontó el encuentro para convertirse en el primer país que levanto el trofeo Jules Rimet.

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Veinte años u dos guerras mundiales después, Uruguay volvió a sorprender al mundo al coronarse como campeón del torneo orbital que se llevó a cabo en Brasil. La escuadra ‘celeste’ llegó al cuadrangular final del campeonato como el equipo con menos posibilidades según los expertos.

En su primera salida ante España no pasó del empate a dos tantos. Alcides Ghiggia abrió la cuenta para el equipo sudamericano, pero Estanislao Basora con un doblete puso a ganar a los ibéricos que vieron como se les escapó el triunfo cuando a quince minutos del final el capitán ‘charrúa’ Obdulio Varela, apodado ‘el negro jefe’ puso el definitivo dos por dos.

En su segunda salida ante Suecia, Uruguay se impuso con un ajustado tres por dos gracias a los tantos de Ghiggia y un doblete de Óscar Míguez.

El destino y el fútbol se unieron para que Brasil con dos victorias ante España y Suecia, y Uruguay definieran el campeonato en un abarrotado estadio Maracaná. A la ‘canarinha’ que por entonces vestía de blanco, le bastaba con un empate para levantar su primer trofeo como campeona del mundo, mientras que ‘la celeste’ necesitaba derrotar a su rival para consagrarse como bicampeón mundial.

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Friaça, delantero del Ponte Preta puso a alucinar a los más de 170 mil brasileños que colmaron el tempo del fútbol carioca con el gol que adelantó a Brasil en el marcador. Pero en la segunda parte la euforia de los ‘brazuca’ se transformó en tristeza. Juan Alberto Schiaffino puso el empate a treinta minutos del final y Ghiggia terminó dio la estocada al vencer a Barbosa cuando quedaban once minutos para que finalizara el encuentro.

La leyenda cuenta que Jules Rimet, presidente de la FIFA en ese momento, bajó del palco del Maracaná faltando quince minutos para que finalizara el partido pensando que iba a entregar el trofeo que lleva su nombre a Brasil, incluso se dice que ya tenía preparado un discurso en portugués, pero el funcionario tuvo que improvisar cuando ingresó al campo y sintió el silencio sepulcral que bajaba de las tribunas. Por eso al ver a los jugadores locales llorando arrodillados en el campo de juego, comprendió que Uruguay había remontado y en una rápida acción entregó el trofeo a Obdulio Varela.

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La derrota cayó como un balde de agua fría para Brasil que desde entonces decidió no volver a utilizar el uniforme blanco y cambiarlo por el ahora tradicional amarillo y azul.

Pero Uruguay también tiene una historia particular con su rival de este jueves. Hace doce años en el Mundial de Sudáfrica 2010, Ghana quedó eliminada de los cuartos de final de ese torneo a manos de ‘la celeste’ en un partido que pasó a la historia por la ‘picardía’ de los sudamericanos.

En primer lugar, por la famosa mano de Luis Suárez que en el tiempo de reposición evitó un gol de los africanos cuando sacó el balón de la línea de gol con uno de sus brazos. El penalti sancionado fue errado por Asamoah Gyan que estrelló al ‘Jabulani’ contra el larguero obligando a la definición por penales donde Uruguay se impuso por 4-2 y para el recuerdo quedó la definición de Sebastián Abréu que cobró el último remate con una ‘vaselina’ que le dio el paso a la escuadra ‘charrúa’ a la semifinal de este campeonato del Mundo.

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