Cancillería prorrogó el contrato de pasaportes con Thomas Greg & Sons
El contrato fue prorrogado por 11 meses, eso quiere decir que irá desde octubre de 2024 hasta el otro año.
Noticias RCN
02:17 p. m.
El Ministerio de Relaciones Exteriores prorrogó por 11 meses más el contrato con Thomas Greg & Sons siga con la expedición de pasaportes.
Portugal será el aliado internacional en el nuevo modelo
El canciller Luis Gilberto Murillo confirmó esta decisión, por lo que la fabricación de pasaportes estará a cargo de la empresa hasta 2025. Asimismo, informó que Portugal fue seleccionado para ser socio en el proceso.
Bajo los criterios que establecimos de que se le dejara infraestructura al país y pasara a manejarse por el Estado, nosotros, precisamente en el cierre de ese proceso, escogimos la propuesta que presentó el gobierno de Portugal porque es la más adecuada para lo que queremos hacer.
Según explicó el ministro, mientras el aliado internacional llega y se ajusta a Imprenta Nacional para que esté encargada de este procedimiento, Thomas Greg & Sons estará a cargo entre octubre de 2024 a septiembre de 2025.
Durante esos 11 meses, el Gobierno estará preparando el empalme. “El servicio de los pasaportes está garantizado y la ciudadanía puede estar tranquila porque puede seguir contando con sus pasaportes en total normalidad”, señaló.
Adicionalmente, el canciller explicó que se construirá una infraestructura para emitir pasaportes en la planta de la Imprenta Nacional y que, en un transcurso de 10 años, se deje de manera completa la administración de esta planta a la Imprenta.
Así funcionará el nuevo modelo
El pasado 14 de agosto, Murillo entregó detalles sobre cómo será el nuevo modelo de impresión de pasaportes. El país que se iba a escoger, en este caso Portugal, iniciará un acompañamiento a la Cancillería en las etapas del nuevo proceso.
Se tendrá un socio privado, en acuerdo con este gobierno extranjero, que habrá la fidelización, impresión y entrega de los pasaportes.
Este modelo híbrido (público y privado) llevará a una tercera fase en el que el gobierno extranjero se encargará de la producción, en alianza con la Cancillería y la Imprenta Nacional, una vez esta última sea fortalecida para asumir la responsabilidad.