Fingió haber sido secuestrada y torturada para verse con su expareja
La mujer deberá pasar un año y seis meses en prisión por haber fingido su propio secuestro.
Noticias RCN
03:27 p. m.
El pasado 18 de septiembre se conoció la sentencia que deberá cumplir una mujer oriunda de California, Estados Unidos, por fingir su secuestro.
Las autoridades estadounidenses determinaron que, tras la gravedad del caso y los recursos que se invirtieron en este, la mujer, identificada como Sherri Papini, deberá pasar 18 meses en prisión.
Según información, los hechos se registraron en noviembre de 2016. El esposo de Sherri alertó a las autoridades sobre su desaparición luego de que ella saliera a correr cerca al sector donde residía, condado de Shasta, y no volviera a casa.
No fue secuestrada, estaba con su ex
Luego de dos semanas, herida y con signos de tortura, Sherri fue hallada a 200 kilómetros de su vivienda. La mujer testificó ante las autoridades que había sido secuestrada por dos mujeres que la retuvieron, durante ese tiempo, dentro de un clóset y privada de su libertad.
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Además, Papini señaló que las supuestas secuestradoras eran de habla hispana, que la habían tenido amarrada con una cadena y que incluso le habían hecho una marcación en su cuerpo con una herramienta caliente.
Una vez las autoridades, incluyendo el FBI, conocieron el caso, iniciaron toda una labor investigativa para dar con el paradero y la identidad de las mujeres hispanas.
Entretanto, el Estado le dio a Sherri más de 30.000 dólares en concepto de fondos de compensación a las víctimas, según CNN.
Pero, para su mala suerte, en el 2020, las autoridades descubrieron que el supuesto secuestro era falso. Una prueba de ADN reveló que Sherri Papini, de 40 años, había estado esas dos semanas en la casa de su expareja sentimental.
Según el testimonio del hombre, Sherri arribó de manera inesperada a su vivienda pidiéndole ayuda, asegurándole que estaba siendo víctima de abuso en su relación y una vez allí, se hizo heridas para decir que había sido torturada e incluso, se cortó el cabello.
Luego de que las autoridades conocieron la verdad de los hechos, Papini confesó su engaño y pidió perdón a sus familiares.
A través de un comunicado, dijo que estaba “profundamente avergonzada por mi comportamiento y tan arrepentida por el dolor que he causado a mi familia, mis amigos, todas las buenas personas que sufrieron innecesariamente por mi historia y aquellos que trabajaron tan duro para tratar de ayudarme”.
Su esposo, tras conocer los detalles del caso, solicitó el divorcio y la custodia de sus hijos, argumentando que Sherri no actuaba de manera racional.
Entretanto, el juez encargado del caso sentenció a Papini a pasar un año y seis meses en prisión y a pagar una indemnización de 310.000 dólares.